Llevar una vida saludable es importante en todos las aspectos. La salud afecta a nuestro estado físico, nuestra estabilidad mental y, por supuesto, a nuestra sexualidad. Pero ninguno de ellos son aspectos aislados, sino todo lo contrario.
La función sexual puede ser una respuesta física a nuestras hormonas, pero el impulso sexual se mantiene gracias a una mente activa y un cuerpo sano.
Las 7 reglas de oro para una vida sexual saludable 1- Tener sexo regularmente
El sexo, como prácticamente todo, es una actividad en la que se mejora con el tiempo. Pero no solo eso, es clave para mantener la pasión en una relación y tiene innumerables beneficios para la salud.
La oxitocina y las endorfinas que se liberan durante el sexo nos ayudan a desestresarnos. La prolactina que se libera durante el orgasmo te hace dormir mejor y, algunos estudios incluso aseguran que impulsa el sistema inmunológico y mejora el aspecto de la piel.
2- Ni alcohol ni tabaco
El efecto del exceso de alcohol sobre la función sexual es por un lado inhibidor, provoca deseo, pero al mismo tiempo puede anularlo por el efecto depresor, que hace que baje el rendimiento.
La nicotina por otro lado, es enemiga de las arterias porque promueve la formación de placas ateroscleróticas en los vasos sanguíneos del pene y además, los contrae.
3- Grasas saturadas mínimas
La ingesta excesiva de grasas saturadas eleva los niveles de colesterol en sangre, y por tanto la acumulación de las placas de grasa ateroscleróticas en los diminutos vasos sanguíneos del pene, al igual que ocurre con la nicotina. Por lo tanto, el pene no puede responder correctamente a la libido.
4- Importancia del zinc
El zinc tiene una función muy importante en la función sexual. Los niños que tienen falta de este elemento sufren de retraso en el desarrollo sexual y los hombres lo necesitan para fabricar esperma.
Entre los alimentos con más zinc se encuentran los mariscos, especialmente las ostras, la carne, las aves de corral y los hígados, los huevos, la leche, las nueces y los granos enteros.
5- Ejercicio físico
El ejercicio regular estimula la producción de endorfinas, las hormonas encargadas de mantener nuestro estado de ánimo. La fatiga y la depresión son comúnmente motivos que llevan a perder el apetito sexual. Por lo que mantenerte activo te ayuda a mantener la libido.
6- Vitamina E
Muchos expertos creen que sin la cantidad necesaria de vitamina E, que se encuentra en los aceites, la margarina, las nueces, las semillas, las verduras y el germen de trigo, la función sexual se ve afectada.
7- Buena nutrición
La salud física es necesaria para tener una vida sexual plena, y es imposible que estemos saludables sin tener una alimentación adecuada. Para ello, la dieta debe basarse en legumbres, granos y otros carbohidratos complejos, abundancia de frutas y verduras y una cantidad modesta de proteína.
Especialmente importantes son la vitamina C para fortalecer las paredes de los vasos sanguíneos y los productos lácteos bajos en grasa, los cereales enriquecidos o fortificados, los granos enteros y las verduras para la riboflavina, que mantiene las membranas mucosas que recubren el tracto reproductivo femenino.
Para tener una vida sexual saludable hay que llevar una vida sana en general. Sigue estos consejos y verás como tu cuerpo, tu mente y tu sexualidad te lo agradecen. Si quieres conocer los beneficios del sexo para la salud, lee este artículo: "10 sorprendentes beneficios del sexo para la salud".
¿Qué entiendes por una vida sexual saludable? ¿Sigues estos consejos? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte estas reglas con tus amigos! Imagen de portada: Realstock / Shutterstock Fuente: rd / lne