Hay estudios que demuestran que la gran mayoría de mujeres (más de un 65%) se tiñen el pelo y muchas de ellas lo hacen con productos de venta en supermercados y farmacias.
Si tú también eres de esas, seguramente sabrás que esos productos contienen una gran cantidad de químicos muy dañinos para el pelo.
El Instituto Nacional del Cáncer (NCI) afirma que más de 5.000 productos químicos diferentes se utilizan en los productos de tinte para el cabello y, hasta en los salones de belleza, utilizan estos tintes con químicos perjudiciales.
Por ello te vamos a enseñar a teñirte en casa de forma segura y sin dañar tu pelo.
¡Aquí van 7 maneras de teñir tu pelo de forma natural!
1- Café
El café es algo que todos tenemos en casa y funciona muy bien si tu objetivo es oscurecerte el pelo. Obtendrás un color chocolate sin dañar tu cabello.
Hazte un café, mejor si es solo y de máquina. Asegúrate de que sea orgánico ya que, en caso contrario, contendrá productos químicos y precisamente eso es lo que no queremos. Déjalo enfriar y mézclalo con tu acondicionador natural.
Añádele dos cucharadas de granos de café orgánicos y aplícatelo sobre el cabello durante mínimo una hora. Enjuágate con vinagre de sidra de manzana para que te dure más tiempo.
Otra opción más simple es lavarte el pelo de manera normal y enjuagártelo con café. Déjalo actuar 2 minutos y vuelve a enjuagártelo con vinagre de manzana para sellar el color. A continuación, enjuágalo por tercera vez con agua tibia y listo.
Por lo general, los resultados son inmediatos, pero si quieres intensificar el color, puedes repetir este proceso hasta alcanzar el color deseado.
2- Té
Puedes utilizar el té negro para oscurecerte el cabello (aunque no es tan efectivo como el café) o el té de manzanilla para aclararlo. Si quieres un tono más rojizo, puedes utilizar el té de rooibos.
Hierve dos tazas de agua y pon de 3 a 5 bolsas de té. Puedes aplicártelo solo o mezclado con tu acondicionador normal.
Si tu objetivo es cubrir las canas, mézclalo con salvia fresca o seca para abrir los folículos pilosos. Déjatelo actuar toda la noche y lávate el pelo de manera normal a la mañana siguiente.
3- Hierbas
Si quieres conseguir un color rojizo, prueba la caléndula, la maravilla, los escaramujos y el hibisco. Si te gusta más el moreno, prueba el romero, la ortiga y la salvia. En el caso de que prefieras el rubio, prueba la camomila, la caléndula, el azafrán y los pétalos de girasol.
Cuece a fuego lento las hierbas en agua durante 30 minutos, déjalo enfriar, cuélalo y aplícatelo sobre el cabello. Déjalo secar al sol a ser posible.
4- Zumo de remolacha y zumo de zanahoria
Ideal para conseguir un tono más cobrizo en un cabello natural. Para conseguir un rojo más intenso, añade más jugo de remolacha, y para un tono más anaranjado añade más zumo de zanahoria.
Crea una mezcla de ambos zumos, añádele una cucharada de aceite de coco y aplícatelo sobre el cabello. Déjalo actuar durante al menos una hora y enjuágatelo con vinagre de sidra de manzana. Repite el proceso si quieres un tono más oscuro.
5- Henna
El polvo de henna formado a partir de las hojas de la planta de henna tiene un pigmento colorante natural que funciona muy bien en el cabello. Cuando se utiliza solo, la henna genera un color rojo anaranjado.
Mezcla una taza de polvo de henna con dos tazas de jugo de limón y una cucharada de vinagre. Déjalo reposar de 4 a 6 horas y aplícatelo sobre el cabello. Déjalo actuar unas 3 horas y enjuágalo con agua tibia.
6- Jugo de limón
Es un aliado perfecto si quieres aclararte el cabello. Pulveriza jugo de limón sobre el pelo y déjalo actuar durante varias horas.
Si te pones al sol, los resultados serán aún mayores, al igual que si te aplicas manzanilla. Los resultados son paulatinos, por lo que tendrás que repetir el proceso durante varios días.
7- Cáscaras de nueces
Este método es perfecto para conseguir un color marrón oscuro en el pelo. Solo tendrás que triturar las cáscaras y hervirlas durante 30 minutos.
Déjalo enfriar y aplícalo sobre el cabello. Déjalo actuar durante mínimo una hora y enjuágate el cabello con agua tibia. También puedes utilizar el polvo de nuez como sustituto de las cáscaras.