Los riñones son los órganos que se encargan de procesar los desperdicios de nuestro cuerpo. Una vez procesados, los desperdicios se convierten en orina y llegan a la vejiga a través de los uréteres.
A veces, el riñón no puede convertir todos los desperdicios en orina y es entonces cuando se solidifican formando pequeños cristales y aparecen las llamadas piedras. La piedra puede expulsarse a través de la orina, sin necesidad de acudir al médico, o, en algunos casos, puede hacerse cada vez más grande, lo que provocaría graves daños en nuestro organismo.
Como hemos dicho anteriormente, una piedra en el riñón es una pieza sólida de material que se forma debido a la acumulación de sustancias presentes en la orina. Puede ser tan pequeña como un grano de arena o tan grande como una perla. Además, es una de las afecciones más dolorosas y de las más frecuentes.
Christopher Coogan, profesor de urología en el Centro Médico de la Universidad de Rush, afirma que alrededor del 10 al 15 por ciento de la población desarrollará cálculos renales (piedras en el riñón) alguna vez en su vida.
De hecho, aquellos que ya han sufrido de piedras en el riñón alguna vez, tienen un 50% más de probabilidades de volver a recaer en esta enfermedad.
Estos son los síntomas más frecuentes de las piedras en el riñón 1- Dolor repentino y muy severo
Los cálculos renales se caracterizan por un repentino dolor abdominal y/o de espalda muy fuerte. Muchas mujeres incluso han llegado a compararlo con el dolor que sufrieron durante el parto.
Según se vaya moviendo la piedra por tu organismo, el dolor puede ir desplazándose de lugar.
"Normalmente uno puede averiguar en qué riñón está la piedra porque el dolor, por norma general, se presenta en ese lado del estómago", dice el Dr. Coogan.
2- Sangre en la orina
Otro posible signo de advertencia de los cálculos renales es encontrar sangre en la orina. El Dr. Coogan dice que esto ocurre en la mayoría de los pacientes que tienen cálculos renales.
Otros posibles signos de advertencia
- Náusea
- Vómito
- Sudor excesivo
- Piel pálida
Por otro lado, ciertos tipos de cálculos renales también pueden causar infecciones, lo que puede conducir a fiebres altas.
Cómo se diagnostican y se tratan los cálculos renales
Los cálculos renales se pueden diagnosticar mediante rayos X, ultrasonidoS o tomografía computarizada.
La mayoría de pacientes expulsan las piedras a través de la orina después de un par de días bebiendo mucha agua, pero algunos cálculos renales requieren de cirugía para ser eliminados. Los médicos a veces prescriben medicamentos para controlar el dolor asociado con este problema para ayudar al paciente a deshacerse de la piedra.
Debes tener en cuenta que, mientras más pequeña sea la piedra, más probable es que la expulses sin necesidad de cirugía, pero el tamaño no afecta al dolor que produce.
Cómo prevenir los cálculos renales
La mejor manera de prevenir los cálculos renales es bebiendo al menos un litro y medio de agua al día.
Esto mejorará la función de tus riñones y de todos los órganos de tu cuerpo y te ayudará a expulsar todas las sustancias dañinas antes de que se acumulen. La deshidratación se considera una de las causas principales de las piedras en el riñón, por lo tanto asegúrate de beber suficiente cantidad de agua diariamente.
¿Has sufrido alguna vez de piedras en el riñón? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Comparte este interesante artículo con todos tus amigos! Fuente: Reader's Digest | Clínica Mayo