El culto al cuerpo esta a la orden del día en nuestra sociedad por lo que no es de extrañar que cuando uno ve un cuerpo bonito, con sus bonitas partes, no pueda resistir la tentación de echar un vistazo, incluso cuando el cuerpo es el de un paciente de hospital.
"Cotilleamos sobre vuestras partes privadas"
Estás enfermo, con el cuerpo hecho polvo y con la ridícula bata que te dan en los hospitales, pero tu aspecto no te importa porque confías en la profesionalidad de los trabajadores, pero quizás no deberías.
Las 5 enfermeras protagonistas de la historia se quedaron tan asombradas con el tamaño del miembro de un paciente incapacitado, que acudían a contemplarlo con asiduidad a su habitación.
Cómo sería su miembro que, una vez fallecido el paciente, fueron a la morgue, abrieron la bolsa del cadáver y echaron un último vistazo.
¿Qué tenía el hombre entre las piernas para levantar tantas pasiones?
Puede que esto suceda con más normalidad de la que te gustaría saber, pero normalmente se lleva en secreto y nadie comenta por los pasillos el tamaño del miembro de un paciente, pero estas enfermeras eran poco discretas y mientras hablaban distendidamente sobre el "arma" del susodicho, otra compañera las escuchó y decidió denunciarlas.
"Múltiples miembros del personal vieron a la víctima mientras estaba incapacitada, incluyendo cuando estaba muerto", explica el informe de la policía.
Lo que hicieron las enfermeras y demás empleados del hospital estuvo muy mal, pero siendo sincero, no puedes dejar de pensar en qué leches tenía el hombre entre las piernas para despertar tanto interés.
¿Sería un miembro con dos cabezas? ¿Estaría retroiluminado con luces de neón?
La próxima vez que estés en un hospital, esperamos que dentro de mucho tiempo, procura tener siempre un familiar contigo al menos cuando estes inconsciente.
