La triste realidad sobre la sociedad actual es que crece sin parar, y no nos referimos a crecer en número, sino al diámetro de la cintura. Ahora existe más sobrepeso en comparación con nuestros antepasados a pesar de todos los avances médicos que tenemos a nuestra disposición.
Si bien llevamos un estilo de vida más sedentario, un estudio descubrió que puede haber algo más a demás del hecho de que comemos más y nos movemos menos.
¿Por qué cada vez somos más obesos?
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de York en Toronto, Ontario, descubrió que si ahora tienes 40 años, deberías comer menos y hacer más ejercicio para evitar ganar peso en comparación a si vivieses en 1971.
El estudio analizó los datos dietéticos de casi 36.400 adultos estadounidenses tomados por la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición entre 1971 y 2008. Por otro lado, también se tuvieron en cuenta los datos sobre frecuencia con la que realizaron actividad física 14.419 adultos en el período que va desde 1988 a 2006.
Los investigadores compararon 3 factores cruciales y descubrieron que, incluso cuando los tres eran idénticos, una persona de 2006 todavía tendría un índice de masa corporal aproximadamente un 10% más alto que el de una persona que hubiese vivido 8 años antes.
Esto significa que una persona que coma la misma cantidad de macronutrientes, que consuma la misma cantidad de calorías y que haga la misma ejercicio que una persona de 1988 de la misma edad, todavía seguiría estando más gorda.
Algo más que calorías ingeridas y calorías quemadas
La autora principal del estudio, la profesora Jennifer Kuk afirmaba, "Nuestro estudio indica que puede haber otros aspectos específicos que contribuyen al aumento de la obesidad más allá de la dieta y el ejercicio".
"Esto se debe a que el control de peso es en realidad mucho más complejo que la diferencia entre energía que conseguimos y energía que gastamos. Es similar a decir que el saldo de tu cuenta de inversión depende únicamente de lo que depositas y lo que retiras sin contar otras cosas que afectan a tu saldo como las fluctuaciones del mercado de acciones, las comisiones bancarias o las tasas de cambio de divisas".
Entonces, ¿cuáles son los otros factores con los que nuestros antepasados no tuvieron que lidiar pero nosotros sí?
Estrés
Ya sea en el hogar o en el trabajo, el estrés es un factor común del aumento de peso. Si bien al principio el estrés puede hacer que pierdas el apetito, el estrés crónico a largo plazo puede aumentarlo.
Esto se debe a la respuesta de lucha o huida de nuestro cuerpo. Una vez que nuestros cuerpos alcanzan cierto nivel de estrés, desencadenan una reacción que nos hace comer en exceso.
Por ejemplo, una de las funciones de la hormona del estrés cortisol es aumentar el suministro de glucosa en el torrente sanguíneo para que pueda usarse como fuente de energía.
Para nuestros antepasados, este suministro de glucosa resultaba útil a la hora de huir de una amenaza. Sin embargo, actualmente no utilizamos activamente esa energía y esto provoca fluctuaciones de azúcar en la sangre y el almacenamiento de grasa.
Factores ambientales
Nuestros entornos son bastante diferentes al de nuestros antepasados. Por ejemplo, la mayoría de los hogares están llenos de productos que pueden afectar a las funciones de nuestro cuerpo.
Algunos de los compuestos más comunes que podemos encontrar en nuestros entornos son los BPA, los PCB, los ftalatos, el triclosán, los pesticidas agrícolas y los retardantes de fuego. Estas sustancias son estructuralmente similares a la hormona estrógeno, la cual puede causar aumento de peso.
Calidad de la comida
La calidad de nuestra comida también ha cambiado en comparación a la de nuestros antepasados. Ahora, muchos de nuestros alimentos son procesados o se les añaden aditivos y conservantes que no existían hace 50 años. Sin mencionar el hecho de que los alimentos se cultivan en un suelo que no es tan nutritivo como lo era antes.
Los cultivos transgénicos y la fumigación con pesticidas son otros factores que afectan a la diferencia en el aumento de peso que estamos experimentando.
Medicamentos con receta
También tomamos muchos más medicamentos que nuestros antepasados, por lo que otro factor adicional que puede estar contribuyendo al aumento de la obesidad incluye el aumento de las prescripciones farmacéuticas asociadas al aumento de peso, reducción de la variabilidad de la temperatura ambiente, disminución de la prevalencia del tabaquismo, cantidad inadecuada de sueño y bajo nivel de calcio".
Los medicamentos recetados vienen con una serie de efectos secundarios, por lo que no es de extrañar que el aumento de peso esté relacionado con su consumo excesivo. Por ejemplo, los expertos informan que hasta el 25% de las personas que toman antidepresivos pueden esperar aumentar 10 kilos o más.
¿Qué podemos hacer?
Aunque es cierto que no podemos retroceder en el tiempo, hay algunas medidas que podemos tomar para ayudar a reducir el aumento de peso no saludable:
- Come alimentos naturales y revisa las etiquetas de los alimentos envasados, evitando cualquier edulcorante artificial, aditivos y conservantes.
- Come alimentos orgánicos tanto como sea posible para minimizar la exposición a pesticidas, fungicidas y alimentos genéticamente modificados.
- Cambia los productos para el cuidado personal y productos para el hogar por alternativas naturales.
- Aprende cómo manejar el estrés de manera adecuada y duerme lo suficiente para evitar las fluctuaciones de azúcar en la sangre y el aumento de peso.
- Toma medicamentos cuando sea absolutamente necesario y evita el uso excesivo de antibióticos.
¡Sigue todos estos consejos y conseguirás mantenerte en forma a pesar de vivir en el siglo XXI! ¡Compártelo con todos tus amigos y familiares! Fuente: Theheartysoul