No es ningún secreto que la forma en la que se cría y educa a los niños marca su futuro como personas tanto profesionalmente como socialmente. Mucha gente se pregunta cuáles son exactamente las razones o los hechos que nos afectan tanto como niños para marcarnos para toda la vida.
Hoy queremos enseñarte algunas de ellas: 1- Si los niños rompen las normas y desobedecen a sus padres.
Las investigaciones han demostrado que además de las características de la niñez, como el coeficiente intelectual, el estatus socioeconómico y los estudios de tus padres, romper las normal establecidas y desafiar la autoridad de tus padres puede hacer que tengas mayores ingresos como adulto. Esto se debe a que este tipo de personas son más proclives a valerse por sí mismos.
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Los hijos de familias con grandes conflictos y peleas constantes, ya terminen en divorcio o no, sufren peores consecuencias que aquellos que tienen padres que se llevan bien. Cuando los niños son testigos de conflictos o peleas que son resueltas de forma comprensiva y pacífica aprenden a tener mejores relaciones sociales y seguridad emocional mientras que aquellos niños que ven a sus padres con conflictos no resueltos y resentidos tienden a sufrir problemas de comunicación y estrés.
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Si los padres se divorcian cuando el niño tiene entre 3 y 5 años es altamente probable que se sienta inseguro en las relaciones en un futuro, especialmente con los hombres.
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Los investigadores de la Universidad de Pennsylvania han determinado que existe una correlación entre las habilidades sociales en la guardería y el éxito dos décadas más tarde como adulto. Aquellos niños que son colaborativos, ayudan a otros, se portan bien y hacen las tareas son más propensos a tener un diploma universitario y trabajo a la edad de 25 años. Sin embargo, aquellos con habilidades sociales más limitadas tienen más probabilidad de ser arrestados o no estudiar en el futuro.
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De acuerdo a un estudio por la Universidad de Harvard tener una madre que trabaja tiene grandes beneficios para los hijos, sobre todo para las niñas. Al parecer aquellas niñas que tienen una madre con un trabajo tienen más probabilidad de encontrar un trabajo, ganar mucho dinero y convertirse en jefas de algún negocio.
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La misma investigación de la Universidad de Harvard también ha demostrado que aquellos niños con madre trabajadora se convertirán en padres más involucrados en la vida de sus hijos y en las tareas del hogar que aquellos con una madre sin trabajo.
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Algunos niños copian todo lo que sus padres hacen o han hecho cuando eran jóvenes, esto implica que los niños creen que sus acciones tienen algún propósito desconocido por lo que se vuelven más prácticos y son más propensos a abrir y compartir su vida con los demás.
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Varios estudios han determinado que existe una correlación entre el abuso sexual (y otras experiencias traumáticas en la niñez) y los problemas alimenticios. Para las mujeres de las que abusaron siendo niñas existe un 27% más de probabilidad de tener obesidad mientras que en los niños el porcentaje aumenta hasta el 66%.
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Aquellos niños que intentan actuar de una forma llamativa para ser populares en el instituto tienden a tener más problemas con el alcohol y las drogas cuando cumplen los 20 años. Esto se debe a que los adolescentes intenten parecer mayores de lo que son con sus acciones cuando aún no han desarrollado la madurez emocional necesaria por lo que no son capaces de lidiar con problemas como el alcohol.
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Un estudio de la Universidad de Oregón ha demostrado que los niños que crecen en ambientes con poco dinero o tienen una clase social más baja de lo normal tienen menos retentiva en su memoria, haciendo que sea difícil la retención de recuerdos cuando son adultos.
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Aquellos niños que ven numerosos programas en televisión de violencia o que no se comportan con lo establecido con la sociedad actual son más propensos a ser personas agresivas cuando crezcan.
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Un análisis a más de 35.000 niños determinó que cuando los niños crecen viendo como sus padres consumen drogas o alcohol, estos niños se convierten en personas muy serias que no saben divertirse cuando son adultos.
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Según la Universidad de Los Ángeles, aquellos niños cuyos padres tienen grandes expectativas, terminan en su mayoría cumpliéndolas, como por ejemplo ir a la universidad.
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Puede resultar en que los niños se conviertan en personas co-dependientes cuando son adultos, lo que termina dando todo el poder a su pareja. Por lo que si un niño decide que quiere intentar cosas nuevas como jugar al fútbol o hacer ballet hay que dejarle intentarlo.
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Al eliminar la televisión de sus vidas los padres quitan la oportunidad de aprender todo tipo de cosas y de desarrollar todo tipo de habilidades como por ejemplo las de comunicación, haciendo que en el futuro tengan más problemas para relacionarse.
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Los niños con padres sensibles y que prestan atención a sus hijos tienen más probabilidad de tener relaciones sanas con personas y alcanzar grandes metas en lo profesional antes de los 30 años.
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Existe una relación entre los maltratos y episodios de depresión, lo que indica que en el futuro los niños tienen más probabilidad de sufrir depresión dependiendo del tipo de maltrato que hayan sufrido.
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Si cuando son niños se les enseña a hacer las tareas de la casa con el resto de la familia estos niños serán más empáticos, colaborativos e independientes en el futuro como adultos.
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