Cuando algunas personas cumplen los veinte años, la pereza se apodera de ellos por completo y comienzan a querer dormir más, estar sentados y evitar cualquier tipo de esfuerzo físico, con hábitos bastante feos. Esta época que ya no eres adolescente pero aún no has entrado del todo en la vida adulta consigue que seas una persona aún más vaga de lo que eras.
18 Hábitos que tienen los veinteañeros perezosos
1- Dormir hasta las tres de la tarde al menos un día del fin de semana, como hacías en la adolescencia.
2- Comer en la cama.
3- Omitir lavarte el pelo hasta que está realmente sucio.
4- Pedir comida a domicilio más de una vez al día.
5- Quedarte sentado durante la publicidad de una película porque te da pereza omitir los anuncios.
6- No lavar el sujetador o las medias porque deben lavarse a mano.
7- Aceptar comisiones altas de cajeros que no son el tuyo en lugar de caminar un poco más y sacar dinero gratis en tu cajero.
8- Usar chaquetas que no tienen botones porque eres muy vago como para coserlos.
9- Comer comida precocinada o platos para microondas en lugar de cocinar tú.
10- Vestirse para hacer ejercicio y acabar distrayéndose con algo más perezoso.
11- Dormir con el ordenador al lado de la cama para poder ver una serie o mirar las redes sociales.
12- Retrasar la quedada porque no te apetece ponerte el sujetador.
13- No cambiar las sábanas hasta que estén lo suficientemente sucias.
14- Perder la vergüenza cuando los repartidores ya te reconocen.
15- Molestarte porque tienes que levantarte para abrirle al repartidor.
16- Comprar ropa interior nueva en lugar de lavar la vieja.
17- Coger un taxi en lugar de caminar.
18- Abrir la nevera y encontrar tan solo algunos condimentos raros y medio limón.
Estos son algunos hábitos de adolescentes bastante vagos a los que les da pereza hacer cualquier cosa que conlleve un esfuerzo físico mínimo.
¿Te resultan familiares estos hábitos? ¿Crees que eres un joven perezoso? ¡Cuéntanoslo en los comentarios! ¡Compártelo con todos tus amigos y familiares para que conozcan estos hábitos! Fuente: Cosmopolitan Imagen de portada: Bojan Milinkov / shutterstock
