¡No os preocupéis, esta historia tiene un final feliz!
Sin duda alguna, el mundo animal presenta una gran cantidad de curiosidades y secretos de los que los seres humanos todavía tenemos que aprender. Esta adorable historia sobre una madre Koala y su cría te cautivará, ya que muestra los lazos tan fuertes de amor que se pueden establecer entre una madre y su hija:
Una madre Koala, llamada Lizzy, fue atropellada por un coche cuando trataba de desplazarse con su cría, Phantom, a través de la Carretera de Warrego, en Coominya, Australia.
La pobre Koala, Lizzy, acabó con un trauma craneoencefálico y un colapso pulmonar, por lo que tuvo que ser operada de urgencias en el Hospital de Vida Salvaje del Zoo de Australia. Phantom, la cría del Koala, no se separó de su madre en todo el tiempo apoyándola como pudo y reconfortándola con sus adorables abrazos.
Un portavoz del Hospital Zoo de Vida Salvaje de Australia realizó un comunicado oficial indicando que Lizzy se está recuperando bastante bien después de la cirugía, y que su cría Phantom todavía se encuentra a su lado.
El Hospital Australiano de Animales Salvajes es un equipamiento que funciona las 24 horas del día y ha tratado ya a más de 58000 especies salvajes nativas como pacientes hasta la fecha.
Sin duda alguna, hacen un gran trabajo por los animales, demostrando ese gran esfuerzo por salvar a todas las pequeñas criaturas que se encuentran en peligro y resultan accidentadas por los despistes de los seres humanos en la gran mayoría de ocasiones.
Es impresionante el amor que esta cría ha mostrado por su madre, y cómo sus instintos han hecho que no quisiera separarse de ella en ningún momento, mostrándole su cariño y apoyo durante el duro proceso que tuvo que seguir su madre.
