A sus 19 años de edad, Austin Harrouf, estudiante de la Universidad del Estado de Florida, estaba cenando con su familia la noche del lunes en Tequesta, Florida. Salió del restaurante enfadado, asesinó a dos personas y a continuación se comió la cara de la víctima, según afirman las autoridades.
Austin fue acusado de asesinato en primer grado, intento de asesinato y robo, informó la Associated Press.
BuzzFeed
Este vídeo en el que se ve a Austin saliendo del restaurante llegó a la oficina del alguacil. Fue grabado minutos antes de que la policía recibiese una llamada al 911 informando sobre un joven que había apuñalado a una pareja. Cuando la policía llegó, se encontró al adolescente mordiendo la cara del hombre que acababa de matar. Esta pareja acababa de llegar de dar un paseo a su casa en Tequesta, afirmaron las autoridades. La esposa del hombre fue encontrado muerta en el garaje y un vecino sufrió múltiples heridas de arma blanca.
Harrouff fue trasladado a un hospital cercano, donde permaneció en estado inconsciente. La policía y los trabajadores del hospital le han realizado algunas pruebas, pero aún no han encontrado ninguna evidencia de consumo de drogas.
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"Él no tenía antecedentes penales... era un buen chico," dijo el Sheriff del condado de Martin William Snyder a la prensa el martes, añadiendo que Harrouff no tenía ninguna relación aparente con sus víctimas y que el ataque parecía ser "completamente al azar".
Las víctimas fueron identificadas más tarde como John Joseph Stevens, de 59 años, y su esposa, Michelle Karen Mishcon, de 53. Ambos tenían en común una hija, Ivy Stevens.
"No hay nada en este caso que parezca tener sentido", agregó Snyder moviendo la cabeza. "Estamos tratando de entender lo que pasó y por qué... pero no encontramos la manera".
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Lo que menos sentido tiene para la policía es que el perfil de Harrouff no encaja en la descripción típica de un asesino trastornado. Fue jugador de fútbol en su instituto y un excelente estudiante, informó el Miami Herald. Daba clases de nivel avanzado en el programa de Bachillerato Internacional de su escuela.
Austin había vuelto a casa para pasar ese fin de semana en Tequesta visitando a su familia con algunos de sus compañeros de la asociación, dijo Snyder a la prensa.
El adolescente estaba cenando con su familia en un bar de deportes local y de repente comenzó a cabrearse, posiblemente porque no le atendían con la rapidez esperada, conjeturó Snyder, y salió del restaurante.
A continuación, anduvo unas manzanas en dirección a la casa de sus padres y se encontró con Stevens y Mischon sentados en su garaje con la puerta abierta, algo que solían hacer muchas noches, dijeron los vecinos a la policía.
Tequesta, Florida en 2015. Lynne Sladky / AP
El chico, supuestamente, atacó a la pareja utilizando múltiples armas, incluyendo un cuchillo y otros objetos afilados, matando a ambos. "Hubo mucha violencia en ese ataque", dijo Snyder.
Un vecino intentó detener a Harrouff, pero el adolescente se volvió hacia él y le dijo: "Usted no tiene nada que ver en esto" y lo apuñaló con un cuchillo, dijo la policía. El vecino se escapó y llamó al 911. Él se encuentra actualmente en el hospital con lesiones leves.
Cuando los agentes llegaron, encontraron a Harrouff inclinado sobre Stevens, "hacía ruidos de animal y gruñía" dijo Snyder.
Después de someter a Harrouff con una pistola eléctrica y un K-9 sin resultado alguno, cuatro policías lograron apartarle del cuerpo del hombre muerto, lo pusieron bajo arresto y lo sedaron.
Snyder dijo que aunque las pruebas preliminares habían dado negativo en drogas, "no se sorprendería" si más adelante las pruebas concluyeran con positivo en Flakka, técnicamente conocida como alfa-PVP, un fuerte estimulante psicoactivo similar a las sales de baño.
Este caso es uno de los más extraños que hemos conocido nunca. Seguiremos esperando noticias para conocer las causas y lo motivos que llevaron a este joven aparentemente tranquilo a actuar de esa manera...
