Si piensas que hace frío donde vives, las imágenes de Oymyakon, Rusia, la aldea más fría de la Tierra, podrían cambiarte de opinión.
Con la temperatura más baja a -71,2 °C (-96 °F), registrada en 1924, y el promedio de enero es de -50 °C (-60 °F), este pueblo es el lugar más frío permanentemente habitado en este planeta.
Amos Chapple, fotógrafo con sede en Nueva Zelanda, decidió emprender un viaje de dos días a Yakutsk, la ciudad más fría de la Tierra, para captar lo que es la vida cotidiana en Oymyakon. «Yo llevaba pantalones finos cuando salí por primera vez a -47 ºC. Recuerdo sentir que el frío estaba agarrando físicamente mis piernas, la otra sorpresa fue que de vez en cuando mi saliva se congelaba en agujas que pinchaban mis labios», dijo el fotógrafo a weather.com.
El fotógrafo recuerda que lo más difícil no era el frío en sí, sino que debido a las bajas temperaturas, su cámara no funcionaba del todo bien; a veces los objetivos se congelaban y no podía enfocar correctamente.
A continuación te dejamos algunas de las gélidas fotografías que realizó este valiente fotógrafo. ¡Te van a dejar helado!
La mayoría de los inodoros se construyen fuera, porque el suelo congelado hace imposible construir la instalación necesaria en el interior de las viviendas.