Las madres trabajan más duro que nadie. No sólo son casi siempre las encargadas de criar y cuidar de sus hijos, que muchas veces tienen que trabajar para pagar las cuentas de la casa. Es una tarea incesante y sin fin, pero no siempre es ingrata y muchas veces tiene su recompensa.
Hay un montón de historias sobre niños sorprendiendo a sus madres con actos de generosidad impresionantes. Este es uno de esos. Mientras estaba en el turno de noche cuando trabajaba, la hija de Tina la sorprendió con la sorpresa de su vida.
Un auténtica y merecida sorpresa para una madre trabajadora! Estos son los momentos que hacen la vida digna de ser vivida.
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