Cuando eres el dueño de una mascota, simplemente tienes que aceptar que todo en tu casa probablemente le parecerá comestible en algún momento. ¿Qué perro no ve cada zapato que cruza su trayectoria como un juguete delicioso diseñado solamente para su propio disfrute?
Pero en Australia, donde los animales salvajes peligrosos acechan en cada esquina, hay mucho más por lo que preocuparse que de si tu perro se come tu zapato o no. Con insectos masivos y animales aterradores, nunca se sabe qué peligro te espera.
Cuando una familia en la Costa de Oro de Australia descubrió que alguien había entrado en su casa, entraron en pánico. Pero se quedaron aún más sorprendidos una vez que descubrieron al culpable: ¡una pitón enorme!
Pronto se dieron cuenta de que la afición de la serpiente por el robo no era lo único extraño. Cuando vieron una gran protuberancia en el medio de su cuerpo, inmediatamente llamaron al entrenador de animales local Tony Harrison, y les ayudó a llevar al reptil a un veterinario.
Una radiografía de la serpiente confirmó que se había tragado algo extraño, pero todavía no tenían ni idea de cuál podría ser el objeto.
El equipo de veterinarios intervino realizando una operación de emergencia a la serpiente. Realizar cirugía en animales no está exento de riesgos ya que los animales no pueden comunicarse con los humanos de la manera de la que podemos comunicarnos los humanos.
¡Habría sido tan fácil si la serpiente pudiera hablar y admitir lo que había ingerido! Sin embargo, sacando un trozo de él, reveló una pista...
Los veterinarios trabajaron cuidadosamente para retirar al misterioso objeto que había dentro del vientre de la serpiente.
Era suave, marrón y peludo, ¿era la mascota de la familia? Cuanto más limpiaban el objeto, más se daban cuenta de lo equivocados que estaban, y se rieron. Lo sacaron a la luz. ¡La serpiente había devorado un osito de peluche de su hijo!
Afortunadamente, la pitón estaba en buenas manos, y parecía que viviría para contar su historia. Se necesitaron 15 puntos de sutura. Sin el cuidado meticuloso y rápido del equipo veterinario, la serpiente tendría pocas posibilidades de sobrevivir a tal comida.
Una vez que se recuperó completamente, fue puesta nuevamente en libertad, donde esperamos que encuentre cosas más apropiadas para deleitarse.
Esta otra serpiente vio a un cocodrilo herido, no pudo resistirse a intentar tragarse los restos. Por desgracia, el cocodrilo resultó ser más de lo que la pobre serpiente podría ingerir. Ninguna criatura sobrevivió.
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Las serpientes son criaturas fascinantes, ¡pero parece que a veces no calculan bien la comida apropiada! Espero que te hayan gustado las historias y, como siempre, publica abajo en la sección de comentarios tu opinión sobre las serpientes.
