Los refugios para animales, especialmente los de las grandes ciudades tienden a ser caóticos, son lugares ocupados con perros ladrando constantemente, en los que cuando entras una gran angustia te recorre todo el cuerpo. En medio de ese ruido y todo el caos, el silencio de un perro puede decir mucho acerca de una tragedia.

Para estos perros, sus celdas no son más que cuatro paredes que albergan un corazón roto.

Oso es un perrito de 8 años, que fue abandonado en el Centro de Cuidado de Animales de Downey justo antes del fin de semana del 4 de Julio. Cuando llegó, era un perro triste y sin ánimos.

A pesar de que sus propietarios nunca dieron una razón oficial para dejarlo allí, Sal Valdepeña, un voluntario local que ayuda a los perros del refugio a encontrar nuevos hogares, cree que sabe el por qué. Oso sufre de alopecia y pioderma, tantas enfermedades de la piel que Sal cree que los propietarios de Oso "no querían molestarse en cuidarle".

Ambas condiciones son tratables, y el refugio Downey incluso tiene una caja en la entrada, donde los miembros del personal de la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (ASPCA) ofrecen ayuda financiera para las familias que no puedan pagar las facturas médicas de su mascota.

Por desgracia, como resultado del descuido de su familia, Oso está sufriendo de una afección mucho más difícil de curar - la angustia.

"Está derrotado y confundido", dijo Sal, en una entrevista en The Dodo. "Mira la pared tembloroso".

Ser llevado a un refugio y ser abandonado por sus familia es una experiencia muy difícil para un perro. Estos son animales emocionalmente muy intuitivos, que sienten verdadero amor por sus familias. Imagínate si tu familia te hubiese puesto en adopción sólo porque tenías una erupción totalmente tratable - simplemente no tiene sentido.

Por desgracia, Oso se encuentra en un concurrido refugio donde el espacio es un bien escaso. Sal ha hecho todo lo posible para que lo adopten lo antes posible, antes de que sea puesto en la lista de animales pendientes para ser sacrificado, pero el tiempo se acaba. Si quieres saber más acerca de Oso y/o tratar de ayudarle, te rogamos que visites el Centro de Cuidado de Animales de Downey. Esperamos que Oso encuentre pronto una familia dispuesto a acogerlo y a darle el amor que se merece.

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Fuente: The Dodo | Sal Valdepeña