Conoce Tim Newton, un hombre de Alaska que definitivamente tuvo un despertar algo fuera de lo común.
"Tim se despertó por los ruidos que había en su terraza, así que decidió salir para ver lo que estaba pasando. Con asombro, cogió su cámara y... ¿puedes creértelo? Había una mamá lince con sus 7 crías", escribió Tim en su página de Facebook.
"Les llamó y todos ellos se alinearon justo enfrente de donde estaba parado (él estaba al otro lado de la puerta de cristal) No cabe duda de que es algo raro de ver, pocas veces puedes encontrarte en una situación como esta. ¡Estaban corriendo y jugando por nuestro jardín!"
"He llegado a la conclusión de que el lince debe de pasar el 1 por ciento de su vida persiguiendo a los conejos, y el 99 por ciento restante persiguiendo a sus hijos. Era prácticamente un juego divertido y salvaje".
Como cualquier madre, la de esta historia debía ocuparse de sus cachorros, especialmente cuando son tan jóvenes. Seguramente llegaron allí por casualidad, era la primera vez que Tim veía algo así en sus terrenos.
Tim dijo que probablemente llegaron antes al jardín, y tras pasar un buen rato jugando y correteando por el césped, decidieron inspeccionar la terraza. En ningún momento pasó miedo, es más, disfrutó como nunca fotografiando a estas hermosas criaturas.
Gracias al material que Tim pudo conseguir con su cámara, hemos podido comprobar otra característica más del comportamiento animal en los linces, y es que todas las madres son iguales, sea humana o no.
Sea como fuese, se ha quedado en una historia que Tim no olvidará en mucho tiempo, y al igual que Tim, si te encuentras algún animal salvaje en tu casa, no le hagas daño, sácale el lado bueno a la situación y disfruta de algo a lo que poca gente puede optar.
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