Echaron a esta madre de una tienda por dar el pecho a su hija

Dar el pecho a un bebé no sólo es algo natural, si no que también es un proceso muy importante que permite a los bebés obtener los nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo.

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Sin embargo, sigue habiendo muchas personas que consideran inadecuado que una madre le den el pecho a su hijo en un sitio público.

Hoy en día, el cuerpo de la mujer es utilizado como reclamo publicitario para numerosas campañas, vemos mujeres semidesnudas en muchos escaparates o vallas publicitarias, pero aún no somos capaces de aceptar que una mujer saque un pecho para alimentar a su hijo.

Esperanza, madre de un bebé, ha vivido en su propia piel los estigmas de la sociedad.

Mientras iba de compras con su hija y su marido, se detuvo en Dillard's, una tienda del Centro Comercial, a darle el pecho. Pidió permiso a una de las empleadas para sentarse en uno de los asientos de la tienda. Sin embargo, minutos más tarde la misma empleada le pidió que dejase el asiento cuando vieron lo que estaba haciendo.

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Después de encontrar a un gerente de la tienda y retransmitir el incidente, ella se alejó de la tienda, pero no sin antes sacar una fotografía que representaba a la perfección la incongruencia de la moral de la empresa.

Publicó la foto en la página de Facebook de la empresa, así como una descripción de lo que le había ocurrido en la tienda. En seguida comenzó a recibir muchas muestras de apoyo.

"Esta tarde, mientras iba de compras por su tienda, mi hija comenzó a llorar pidiendo comida.

Busqué una zona apartada y tranquila de la tienda para darle el pecho. Cuando la encontré pregunté si podía sentarme aquí a darle de comer a mi hija.

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La dependienta a la que le pregunté asintió.

Entonces empecé a amamantar a mi hija. No utilicé nada para taparme, solo lo hice en la foto para demostrar la incongruencia. Me quité discretamente la camisa y su cabeza me tapó el pecho.

La misma señora me dijo entonces que no podía "hacer eso" aquí. Me dijo que tendría que irme al baño.

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Me quedé muy sorprendida ya que nunca me habían prohibido amamantar a mi hija en 18 meses.

Con tono molesto, comenzó a darme indicaciones para llegar al baño. (Al final del pasillo, tome el ascensor, luego gire la esquina...)

Estoy seguro de que mi niña hambrienta entendería que teníamos que hacer un largo recorrido para llegar a un lugar más apartado donde pudiese comer... pues NO.

Inmediatamente me levanté y pregunté por el gerente para que pudiera presentar una queja formal (lo cual hice de manera online).

Cuando estábamos saliendo de la tienda pasé por este anuncio de sujetadores de esta misma marca.

¿Por qué sí es aceptable una imagen gigante de los senos de esta mujer en una pared, pero yo no puedo alimentar a mi hija?

Atentamente, Una mamá cabreada que nunca volverá a ir de compras a Dillard's."

Junto con la ola de apoyo que recibió en Internet, también consiguió una respuesta de Dillard's, pidiendo disculpas por el incidente y que afirmando que aboga por el derecho de las madres a amamantar a sus hijos donde quieran.