El verano está muy bien para irnos de vacaciones a la playa, refrescarnos cual hipopótamo en el agua, disfrutar de las noches al aire libre, etc. Pero cuando te toca quedarte en casa, el calor que entra por esas ventanas es insoportable.
Está claro que no todos nos podemos permitirnos el lujo de tener el aire encendido todo el día con lo caro que es, abrir las ventanas tampoco es muy buena solución puesto que se nos llena la casa de mosquitos, por lo que lo único que nos queda es cerrar las cortinas y que al menos no entre tanto sol. El problema de esto es que el sol penetra en las cortinas y se come todo el color de éstas. Si las cortinas fuesen baratas no importaría pero con lo caras que son...
The Wicker House
Aunque creamos que no hay solución posible. Si le echamos imaginación al asunto, podemos ideárnoslas para no pasar tanto calor este verano.
Emily de The Wicker House ha encontrado la solución perfecta a nuestro problema. Usó unas sábanas básicas que sólo le costaron 5€ para hacer sus propias cortinas. ¿Cómo? Pues de una manera mucho más simple de lo que puedas pensar...
The Wicker House
Cuando Emily las compró lo primero que hizo fue lavarlas y plancharlas bien para que no les quedase ninguna arruga.
Midió qué dimensiones de tela necesitaba para cada cortina y se dio cuenta de que cada ventana necesitaría una sábana que posteriormente dividiría en dos para crear las cortinas.
Emily cortó la sábana longitudinalmente por el centro para crear dos partes iguales.
The Wicker House
"Dependiendo del tamaño de la ventana, decides por dónde necesitarás cortar", escribió Emily en su blog. "Sin embargo, para una ventana de tamaño medio como éstas, un corte por la mitad cubrirá la ventana perfectamente".
Después de hacer el dobladillo de los bordes que había cortado, Emily empezó a realizar cortes en la parte superior de lo que sería la cortina. El dobladillo de esa parte es doble con lo cual no hay problema.
The Wicker House
"Hice unas ranuras teniendo cuidado de cortar sólo la capa superior del dobladillo", escribió Emily.
Después de eso lo único que le quedaba por hacer era colgar las cortinas y disfrutar del nuevo aspecto de su salón.
The Wicker House
"Entra la luz, pero son lo suficientemente gruesas como para darnos la privacidad que deseamos", escribió Emily.
Encuentra más detalles sobre el proyecto en su blog.
