Si eres de esas personas que todavía no ha tenido suerte en el amor, no te preocupes. La historia está aquí para ayudarte. Ya estés buscando a tu media naranja o quieras convertirte en un auténtico Casanova, estamos seguros que estos consejos te van a ser útiles. Aunque no podemos asegurar que vayan a funcionar, porque algunos son un poco escabrosos.
10 Consejos de la historia para mejorar tu vida amorosa
1- Pasar tiempo de calidad juntos
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Lo normal en la historia ha sido que las mujeres se quedaran en casa, cuidando de ella y de los hijos, mientras los hombres salían a trabajar.
Sin embargo, las mujeres teutonas creían firmemente que debían estar al lado de sus maridos, incluso durante la guerra. Ellas alimentaban a los hombres y atendían a los heridos, pero tampoco dudaban en coger las armas cuando surgía la necesidad.
2- Ser prácticos
Esta es una lección que aprendimos de los antiguos egipcios, quiénes acabaron con los rituales de cortejo elegantes y las ceremonias complicadas. Si una mujer trasladaba sus cosas de la casa de sus padres a la casa de un hombre, significaba que estaba casada.
Los divorcios también eran bastante sencillos: se esperaba que las parejas permanecieran juntas de por vida, pero si decidían separarse, se dividían sus propiedades y los niños se iban con la madre.
3- No emborracharse delante de los suegros
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Impresionar a los padres de la novia era algo de suma importancia, ya que históricamente ésta necesitaba el permiso de su padre para casarse.
Cleisthenes, quiso casar a su hija Agariste en el siglo VI a.C., por lo que organizó una competición con desafíos como carreras de carros y lucha libre para encontrar al mejor pretendiente. Hippocleides de Artica se convirtió en su favorito, pero en el banquete de honor se emborrachó y empezó a actuar como un idiota.
4- Compartir un lenguaje secreto
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Hace unos años, para los enamorados, era difícil tener privacidad bajo la atenta mirada de sus padres. Así que una buena forma de poder decirse lo que quisieran era aprender el código Morse.
Esto fue lo que hizo Thomas Edison para cortejar a su segunda esposa, Mina Miller. Aunque la chica tenía 20 años y él 39 cuando comenzaron su relación, no les estaban permitidas las demostraciones públicas de afecto en presencia de sus padres. Por eso, Edison le enseñó código Morse a Mina.
5- Encuentra pareja en el mercado matrimonial
Herodoto escribió sobre una antigua costumbre en las aldeas de Babilonia que aseguraba que todos encontraban pareja, incluidos los hombres más pobres y las mujeres más feas. Iban al mercado del matrimonio, donde los hombres pujaban por sus futuras esposas.
Las mujeres más guapas iban primero, normalmente casándose con los hombres más ricos. Cuando la subasta llegaba a las mujeres que se consideraban más feas, lisiadas o demasiado viejas, el subastador le pagaba a los participantes para que las aceptaran como esposas. De esta forma cada mujer encontraba a su marido.
6- Diseccionar a una mujer para entender su anatomía
Este consejo proviene del tratado The Physiology of Marriage, donde el novelista francés del siglo XIX, Honore de Balzac, descubrió los secretos de un matrimonio de éxito. Entre los muchos consejos útiles, Balzac advierte que el matrimonio es una ciencia y que un hombre debería diseccionar al menos a una mujer antes del matrimonio para estudiar su anatomía.
7- Intercambio de regalos
A lo largo de la historia, las posesiones materiales siempre han sido una parte importante del matrimonio. En algunas culturas el novio tenía que pagar dinero, tierra o riquezas a la familia de su futura esposa. Sin embargo, en otras culturas, era el padre de la novia el que tenía que contribuir con la familia del novio.
Con el tiempo, los regalos entre amantes se han vuelto más comunes y sensuales, incluso sin un compromiso matrimonial de por medio.
8- Poemas de amor
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Algunas personas tienen problemas para expresarse y la mejor forma de hacerlo es a través de poemas de amor. Por eso, para inspirarse, se pueden recurrir a la civilización más romántica de la historia: los vikingos. No solo tuvieron que ver con saqueos, sus poemas y sagas están llenos de amor verdadero.
9- Prueba el amor de una botella
A lo largo de la historia, las personas que no habían logrado encontrar a su media naranja, podían recurrir a la química en forma de poción de amor. Casi todas las culturas tenían su propia comida o bebida para aumentar la líbido, hacer que la gente se enamore o incluso curar la impotencia.
10- Utilizar un abanico para coquetear
Los abanicos existen desde hace muchos años, pero se convirtieron en un accesorio de moda en la Europa del siglo XVIII. Las mujeres se dieron cuenta de que el abanico se podía utilizar para algo más que apariencia, y muy pronto se empezó a usar un "lenguaje de abanico" secreto para coquetear con sus admiradores masculinos. Se podían transmitir más de 30 mensajes con ellos.
