De fresa, chocolate o vainilla, todo un clásico, de pistacho o incluso de calabaza... Hay sabores para todos los gustos, y es que nadie puede resistirse a un helado cuando el calor aprieta.
Pero, ¿es lo primero que tomas cuando te despiertas por la mañana? ¿Lo cambiarías por una taza de café? ¿O unas tostadas?... Seguro que nunca has considerado desayunar helado, pero quizás deberías empezar a hacerlo. Según un estudio japonés publicado por The Telegraph comer helado nada más levantarte puede ayudarte a estar en un mayor estado de alerta o a "mejorar tus capacidades de procesamiento de la información".
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Un ensayo clínico llevado a cabo por un profesor de la Universidad Kyorin de Tokio observó que las personas que comieron helado inmediatamente después de despertarse obtuvieron mejores resultados en una prueba de ejercicios mentales, que aquellos que no lo hicieron. También pudieron ver que el grupo de personas que consumió esta delicia helada tuvieron mejores resultados que el grupo que simplemente tomó agua fría.
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¿Significa esto que la mejor forma de empezar el día es comiéndote un rico helado? Un especialista en nutrición cuenta en The Telegraph que los altos resultados en las pruebas podrían deberse al hecho de que los sujetos simplemente habían comido al levantarse, no necesariamente porque ese alimento fuese helado.
Y es que si está demostrado, según gran cantidad de estudios, que ingerir alimentos después de despertarse puede ayudarnos a "funcionar" mejor el resto del día; pero quizás no sea necesario que ese alimento sea un helado.
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Aún así, si quieres puedes probar a desayunar helado, quizás ese sea el secreto para que a partir de ahora rindas más en el trabajo o en los estudios.
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