Senquavious Driver se encontraba comprando con su tía, Connie Belle Jenkins Sweet, cuando se vio que una anciana estaba pasando dificultades en el aparcamiento. Sin vacilar, Driver corrió para ayudar a la mujer de 81 años que no podía valerse por sí misma. No solo eso, el joven de 17 años acompañó a la mujer hasta que esta realizó toda la compra para asegurarse de que no tenía ningún problema.
Driver, quien además de ser un estudiante ejemplar juega en el equipo de baloncesto de la escuela, entabló conversación con la simpática anciana y a partir de ahí supo que recientemente había sufrido una caída que apenas le dejaba caminar.
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Una vez que la anciana realizó la compra, Driver la ayudó a volver a su coche y se aseguró de que entraba en su vehículo sin problemas.
Su tía Connie fue capaz de tomar algunas fotos de la extraña pareja y las publicó en su página de Facebook con un breve comentario elogiando a su sobrino.
Así fue la muestra de amabilidad con la que Driver conmovió a todos.
Tal y como su tía Sweet escribió, su hermana hizo un trabajo formidable con la educación de este joven ejemplar.
target="_blank" rel="nofollow noopener noreferrer">Facebook / Senquavious Dy'Quon Driver
Senquavious Driver, un joven de 17 años, se encontraba realizando la compra junto a su tía cuando notó que una anciana tenía dificultades para salir de su coche y llegar a la tienda.
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Gracias a que se encontraba acompañado por su tía Connie Belle Jenkins Sweet, tenemos la oportunidad de ver las imágenes que captaron el momento de aquel afortunado encuentro.
"Hice orgullosa algunas fotos desde la distancia. Al ver aquello se me saltaron las lágrimas. Él quería ayudarla aún sin conocer cuál era su situación. Aquella adorable anciana se puso contentísima porque mi sobrino se detuviese un momento y se ofreciera para ayudarla."
El joven Driver se acercó a la mujer y ayudó la anciana a salir de su vehículo. Al parecer, la anciana había sufrido recientemente una caída que le había dejado lesiones en la espalda que no le permitían andar con normalidad. Entró en la tienda con ella y se aseguró de que fuese capaz de conseguir las cosas que necesitaba sin problemas.
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La mujer de 81 años caminó apoyada y protegida por Driver todo el tiempo. El joven se encargó de facilitarle su tarea en la medida de lo posible.
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Driver la acompañó de vuelta a su coche y se aseguró de que no tenía problemas de entrar en su auto antes de despedirse. Gracias a la inestimable ayuda de Driver la anciana volvió a su casa feliz y contenta. ¡Vaya muchacho más agradable!
