Por mucho que nos cueste aceptarlo, el pecho cambia mucho con el paso del tiempo. La piel, las hormonas, las subidas y bajadas de peso, etc., afectan mucho más de lo que imaginamos. ¿Quieres saber exactamente los cambios que sufren a cada edad?
Así cambian tus pechos con el paso de los años
A los 20 años
Siguen creciendo
¿Sabías, que por lo general, los senos continúan creciendo durante al menos cinco años después de la primera menstruación?
Su mejor momento
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Una vez que están completamente desarrollados, se ven mejor que nunca. Entre los 20 y los 30 años tienen una piel firme y lisa, y a menos que sean extremadamente grandes, están turgentes y se ven brillantes debido al tejido denso que los forma.
A los 30 años
Hinchazón temporal
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Los cambios hormonales, como el periodo, influyen de forma sustancial en el tamaño de los pechos, debido a que los estrógenos aumentan desde unos días antes, haciendo que se hinchen los conductos y las glándulas mamarias. El embarazo, la lactancia o los cambios de peso, también puede provocar que se hinchen de forma temporal.
Tamaño y color de los pezones
Además de aumentar el tamaño, el embarazo también puede alterar el color de la aureola y agrandar los pezones. Una vez que das a luz, la aureola debería volver a su tono natural, aunque en muchos casos el tamaño no disminuye.
Suavidad
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Una vez que pasas los 30, empiezas a notar que tus senos se sienten más suaves. Puede ser señal de has cogido kilos de más o de que estás empezando a envejecer. El denso tejido conectivo se empieza a reemplazar por grasa mamaria.
A los 40 años
Empiezan a caer
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Una vez que te empiezas a acercar a la menopausia, tus senos empiezan a caerse. Con los años, la piel se estira, lo que hace que caigan y cuelguen, incluso si no son especialmente grandes.
Pierden volumen y la piel pierde elasticidad
La piel pierde elasticidad y el grosor de la dermis, que permite la rigidez, adelgaza y se afloja. Además, después de la menopausia, los niveles de estrógenos de las mujeres disminuyen, pudiendo hacer que los senos pierdan volumen.
Propensión a la irritación de la piel
Cuanto más tiempo cuelguen, más probabilidades hay de que sudes o desarrolles problemas en la piel debido a la fricción. Las mujeres con la piel más clara pueden notar que el área se vuelve de un color rosa oscuro, mientras que la piel oscura, se oscurece aún más.
Pérdida de sensibilidad
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Las sensaciones de alrededor del pezón y la aureola provienen de los nervios de dentro del pecho. A medida que crecen o caen con el tiempo, ese nervio se estira y la sensibilidad puede disminuir.
