Resulta bastante común intentar evitar la visita al médico cuando nos vemos perjudicados por dolores que a priori no parecen tener mayor importancia. Después de todo, es normal que tengamos que experimentar malestar a lo largo de nuestras vidas.
En muchos casos, las pequeñas molestias originadas por esfuerzos desmedidos u otras causas, se irán tal y como vinieron por sí solas sin necesidad de intervención médica. Sin embargo, existen algunos tipos de dolores que nunca, bajo ninguna circunstancia, deben ignorarse.
A continuación te mostramos 7 dolores que nunca debes ignorar:
1- Dolor ardiente o entumecimiento en las piernas o los pies
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Sentir un dolor ardiente en las piernas o los pies podría deberse a una neuropatía, más específicamente, a una neuropatía diabética.
Casi una cuarta parte de los 23 millones de estadounidenses que tienen diabetes no han sido diagnosticados, según la Asociación Estadounidense de Diabetes. Algunos de los síntomas de la diabetes incluyen:
- Boca seca
- Sensación de sed y hambre constante
- Piel seca y picores
- Dificultad a la hora de curar heridas o cortes
- Micción frecuente y urgente
- Visión borrosa
Si muestras alguno de estos síntomas y también tienes una sensación de ardor o una sensación de entumecimiento/hormigueo en las piernas o los pies, podrías ser diabético. Acude al hospital para comunicarle tu preocupación al médico lo antes posible.
2- Dolor inexplicable y persistente en el pecho, la garganta, la mandíbula, el brazo o el vientre
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La mayoría de la gente sabe que un dolor en el pecho podría significar un problema cardíaco e incluso un ataque al corazón. Sin embargo, los dolores (incluso las molestias más pequeñas) en la garganta, la mandíbula, el brazo o el abdomen también podrían indicar problemas cardíacos graves.
Algunas personas con problemas cardíacos confunden sus síntomas iniciales con problemas estomacales o intestinales. Los problemas cardíacos incluso pueden provocar los mismos síntomas que el reflujo. Si experimentas una incomodidad inexplicable y persistente en cualquiera de estas áreas, y sabes que tienes un alto riesgo de problemas cardíacos, visita a un médico.
3- Un dolor de cabeza insoportable
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Los dolores de cabeza son una molestia que todos tenemos que sufrir en algún momento u otro. A menudo, los dolores de cabeza ocurren debido a problemas fáciles de remediar, como la deshidratación, la congestión nasal o la tensión y el estrés.
Sin embargo, si te encuentras bien hidratado y no te sientes estresado o nervioso, pero tu dolor de cabeza aún no desaparece, lo mejor es que se visites a tu médico.
Sufrir un terrible dolor de cabeza (el peor dolor de cabeza de tu vida) puede ser un signo de hemorragia cerebral, problema que requiere atención de emergencia inmediata.
4- Dolor de espalda repentino o persistente
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A todos nos ha dolido la espalda en algún momento de nuestras vidas, ya sea por pasar demasiado tiempo frente al ordenador, mantener una mala postura o realizar un esfuerzo físico importante.
Sin embargo, un dolor repentino en la parte inferior de la espalda o el área que se encuentra entre los hombros podría indicar un desgarro mortal en la aorta, la artería principal que va al corazón.
Una rotura en esa zona, disección aórtica, es un problema muy serio y debe ser atendido por profesionales médicos de inmediato. Si sientes un dolor en la espalda que no puedes justificar y eres propenso a sufrir problemas como presión arterial alta, problemas de circulación, tabaquismo y diabetes, consulta a un médico de inmediato.
5- Dolor abdominal extremo
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Los dolores abdominales repentinos, agudos y extremos deben ser investigados por un médico de inmediato.
Condiciones como problemas con la vesícula biliar (incluyendo cálculos biliares), pancreatitis, úlceras estomacales o intestinales y apendicitis pueden presentarse como un fuerte dolor abdominal.
Estos no son problemas que se puedan ignorar y requieren tratamiento en forma de medicación o cirugía.
6- Dolor o hinchazón en las pantorrillas
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Cuando un calambre en las piernas viene acompañado de hinchazón o permanece como un dolor constante, el dolor en la pantorrilla podría indicar algo mucho más peligroso que un simple espasmo muscular, en realidad podrías estar sufriendo una trombosis venosa profunda o TVP.
La TVP es cuando se forma un coágulo en una de las venas profundas de la pierna. El peligro de este problema aparece cuando el coágulo se desprende de la vena de la pierna y viaja a los pulmones, lo que origina una embolia pulmonar, una afección que puede hacerse mortal en un abrir y cerrar de ojos.
Otros signos que advierten una TVP incluyen:
- Calor en la piel de la pierna afectada.
- Piel roja o descolorida en la pierna afectada.
- Visibilidad de venas superficiales.
7- Dolores extraños, imprecisos, inexplicables o dolores combinados
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Una combinación de dolores sutiles pero crónicos o dolores extraños que no pueden justificarse médicamente podría indicar un problema bastante profundo: la depresión.
Si tiene dolores molestos que no tienen una causa clara o una combinación de dolores que surgen sin motivo aparente, es posible que sufras depresión clínica. La depresión puede causar dolor en el cuerpo, y aunque ese dolor no pueda ser explicado por otros fenómenos médicos.
Además de los dolores, para diagnosticar la depresión deben estar presentes otros síntomas como la pérdida del interés en actividades que solías hacer, incapacidad para trabajar o no querer socializar.
Habla con su médico para obtener más información acerca de los recursos a los que puedes recurrir en caso de depresión.
