Los héroes son aquellos que llevan a cabo grandes acciones desinteresadas y que se preocupan por el resto sin importarles nada más. Muchos héroes han sido reconocidos por la historia y por el cine, pero muchos otros han quedado en el olvido y también merecen un gran reconocimiento.
Los héroes olvidados que merecen ser recordados
1- Maximilian Kolbe
Wiki Commons
Era un católico polaco que murió en Auschwitz. Fue detenido por los nazis por publicar propaganda a favor de los judíos, pero le liberaron al poco tiempo. Las represalias no le importaban, y por ello, acogió a cientos de judíos en su iglesia.
Los nazis volvieron a atraparle y llevarle de vuelta a los campos de concentración. Uno de los días que estaba recluido, los soldados decidieron elegir varios prisioneros al azar para matarlos, literalmente, de hambre y deshidratación. Kolbe pidió ir en lugar de uno de los elegidos que tenía familia.
Lo torturaron durante tres semanas, pero no murió, por lo que los soldados le inyectaron una sustancia química para acabar en su vida. En 1982, la Iglesia le canonizó.
2- Jabbar Gibson
EricEnfermero/Wiki Commons
Este joven de veinte años era un traficante de drogas de la zona de Nueva Orleans. Dos días después de la tragedia del huracán Katrina, se las apañó para 'robar' una autobús escolar y salvar a todos los amigos y familiares que pudiera. En total salvó a 60 personas.
La policía le paró en mitad de su rescate e intentó detenerle por sus antecedentes hasta que los pasajeros explicaron lo que estaba ocurriendo y le permitieron seguir con su labor. Cuando llegó a la zona de la Cruz Roja, le dijeron que estaba lleno y debía de marcharse, pero consiguió que dejaran pasar a todos.
3- Liviu Librescu
Wikipedia
Este profesor de 76 años estuvo presente en la masacre de 2007 de Virginia, en la cual un estudiante mató a 32 personas e hirió a 17 en la universidad con una pistola. Cuando el asesino se acercaba a su clase, el profesor consiguió sacar por la ventana a 22 estudiantes mientras el sujetaba la puerta para impedirle la entrada.
El asesino no dudo en disparar a través de la puerta y cinco balas impactaron contra el cuerpo del profesor, que siguió aguantando hasta que no pudo más. Se salvaron 22 de 23 estudiantes.
4- Nawal Soufi
American Tonight
La intérprete Nawal Soufi le dio su número de teléfono a varias personas antes de marcharse de Syria para vivir en Italia. Lo que no esperaba es que su número se hiciera viral y empezó a recibir cientos de llamadas de personas que se habían quedado en el mar intentando huir del país.
Cuatro años después, sigue respondiendo estas llamadas y ayuda a a enviar a la Guardia Costera a las coordenadas que indican cada llamada. Cada día, puede ayudar a rescatar a unos 8 inmigrantes a no morir helados en el mar.
5- Claude Elliot
Gander Beacon
Tras los ataques terroristas del 11S, se ordenó que todos los vuelos que estaban en el aire aterrizaran en las ciudades más cercanas. Una de ellas fue Gander, que pasó de tener 6 vuelos diarios a 38 y la ciudad no tenía recursos para todos los visitantes.
El alcalde, Claude Elliot, pidió en televisión que mandaran donaciones y que todos los habitantes abrieran sus casas a los nuevos visitantes. Algunas de esas personas siguen siendo mejores amigos.
6- Los ingenieros de Chernobyl
Wikipedia
Tan sólo diez días después del desastre de Chernobyl, se empezó a formar una piscina de agua radioactiva bajo el reactor nuclear, lo que podía provocar tal explosión que la radiación se extendería miles de kilómetros.
Tres ingenieros llamados Alexei Ananenko, Valeri Bezpalov, y Boris Baranov se atrevieron a ir, vestidos sólo con trajes que no aguantarían, y vaciar dicha piscina radioactiva y evitar un mal mayor.
7- Ruth Burks
FOX
Durante más de una década, Ruth Burks, médico en el Hospital de Little Rock, pasó su tiempo acompañando miles de pacientes que tenían SIDA y que habían sido abandonados por sus familias a causa de su enfermedad.
Los hospitales tampoco los querían, por lo que ella los trataba y los acogía en casa. En más de cuarenta ocasiones tuvo que enterrarlos ella misma, ya que las iglesias tampoco querían saber nada de ellos.
A mitad de los 90, había conseguido demostrar que esta enfermedad no se contagiaba por la piel, ni por pasar tiempo con los enfermos. Además, también se probó que tener a alguien que te quiere cerca es una gran ayuda en estos casos.
