En numerosas ocasiones, los padres permiten ciertos comportamientos a los niños por el simple hecho de que son niños. Ahí reside el primer problema de educación que afecta a cómo serán nuestros hijos en un futuro.
Mientras son pequeños, son más influenciables y es cuando aprenden a diferenciar lo correcto de lo incorrecto, por ello hay ciertos comportamientos que nunca deberían ser ignorados por un padre. A continuación te mostramos los que debes vigilar más de cerca.
Cosas que no debes dejar que tu hijo haga:
1- Interrumpirte mientras hablas
Tu hijo puede estar muy emocionado por contarte algo, pero si le permites que interrumpa tus conversaciones, le estás dando a entender que es correcto hacerlo. De esta forma no está aprendiendo a ser considerado o a esperar pacientemente su turno, esto puede llevar a desarrollar un alto grado de frustración cuando no se hacen las cosas inmediatamente.
La próxima vez que estés con alguien o vayas a hablar por teléfono, dile a tu hijo que debe esperar callado a que termines sin interrumpirte. Si te da en un brazo o intenta captar tu atención mientras hablas, debes señalarle una silla, un sofá o algo que le indique que debe esperar.
2- Exagerar la verdad
Puede no parecer algo muy relevante en un principio si, por ejemplo, tu hijo miente y dice que ha estado en Disneyland para no sentirse desplazado en clase, pero lo cierto es que sí lo es. Hay que enseñarles desde pequeños la diferencia entre la verdad y la mentira, y que mentir para quedar bien delante de otros no es la solución.
Cuando pilles a tu hijo mintiendo o exagerando algo debes advertirle que no es correcto decir que lo ha hecho. Explícale el cuento del lobo y como nadie le creerá nunca si miente a menudo.
3- Hacer como que no te oye
Si tu hijo te ignora cuando le dices que recoja los juguetes o que se monte en el coche, repetírselo varias veces no es la solución, ya que le estás enseñando que habrá un recordatorio, una segunda oportunidad en lugar de hacer las cosas a la primera. Si permites que este comportamiento continúe, le estás dando el poder a tu hijo y se volverá una persona desafiante.
En lugar de ordenarle que haga algo desde el otro lado de la habitación, tienes que levantarte e ir a dónde esté para decirle lo que debe hacer. Haz que te mire mientras hablas y que te diga 'vale' como confirmación. Es una forma de que se centren en lo que deben hacer.
4- Pataletas
Muchos niños tienden a imitar los comportamientos de los adultos o los adolescentes para ver la reacción de sus padres y esto lleva a que den malas contestaciones, ignoren a sus padres o hagan malos gestos. Algunos padres ignoran este comportamiento y es el mayor error que pueden cometer.
Enséñale a tu hijo que ese comportamiento no es el correcto. La idea no es hacer sentir mal a tu hijo, sino enseñarle como nuestras palabras y gestos repercuten en los demás.
5- Desobedecer
Cuando tienen dos años puede ser gracioso que no te hagan caso y cojan una galleta fuera de horas de comida, o quizás que vean una película cuando no deben, pero espera a que se hagan adultos y se marchen a ver amigos en mitad de la noche.
En casa debe de haber normas que los niños deben aprender a cumplir desde pequeños. Si no las obedecen, debes castigarles y recordarles que todo incumplimiento va a tener una consecuencia que no será positiva para ellos.
6- Violencia
Los juegos con otros niños o con los propios hermanos pueden derivar en golpes o actos un tanto agresivos. Debes intervenir cuando veas estos comportamientos, ya que si no lo haces, estás enviando el mensaje de que herir a otros es correcto.
Asegúrate de recordarle en cada ocasión que está hiriendo a otra persona y que eso no es lo correcto. Recuérdaselo antes de ir a jugar con otros niños y si ves que sigue con dicho comportamiento y no le dejes jugar con los otros niños.
