Las personas solemos decir mentiras del tipo: «Me quedé sin batería» o «No estaba en casa». Los expertos, sobre todo los psicólogos y la policía, han estado analizándolas durante años para tratar de detectarlas de diversas formas, y una de las señales que más las delatan es la voz.
Cómo detectar que alguien miente con la voz
Alteración del tono de voz
Al mentir, se produce una tensión en las cuerdas vocales que altera el tono de voz. De esta forma la voz normalmente se hace más aguda, aunque sea de forma momentánea y después volviendo a la normalidad. Esto puede ser difícil de detectar en voces no conocidas, pero suele apreciarse bien en familiares o amigos.
Frases cortadas
Cuando alguien está contando algo que no es real, le suele costar terminar las frases. La idea es que des por entendido algo que no te está diciendo, para así evitar contar la mentira completa.
Bajada del volumen
Aunque la voz suene más aguda, el volumen disminuye ligeramente. El motivo es que el cerebro trata de mezclar la mentira con cosas ciertas, para que lo que no es cierto pase más desapercibido. Lo normal es que el volumen de la voz baje drásticamente en palabras o nombres específicos.
Calidad de la modulación
Además de bajar el tono de voz, la pronunciación de cada sílaba también se ve afectada. Es normal tartamudear, acortar las sílabas o incluso tener dificultad para pronunciar palabras completas.
Cambios de velocidad y fluidez
Cuando alguien miente, es normal hablar de forma más lenta y accidentada de lo normal, pero también de forma rápida y concluyente. Ya sea porque va inventando la información sobre la marcha o porque lo tiene todo estudiado. Esos cambios de velocidad y fluidez se deben a un conflicto interno.