Cuando se trata de autoexploraciones destinadas a averiguar si existe alguna anomalía relacionada con el cáncer, siempre pensamos en el cáncer de mama. Sin embargo, existen otros muchos tumores que también pueden ser previamente diagnosticados en casa de esa manera. De hecho, hacerte chequeos rutinarios cada 6 meses podría salvarte la vida.
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Según el Centro de Control y Prevención de Enfermedades, 76.665 personas fueron diagnosticadas con algún tipo de melanoma en 2014. De esos casos, 9.324 resultaron ser mortales. Hay innumerables (y sorprendentes) factores de riesgo que podrían aumentar las probabilidades de padecer cáncer de piel. Por este motivo, realizarte una autoexploración en casa podría ser crucial para prevenir los daños.
El 44% de los melanomas son diagnosticados por los pacientes y no por los médicos, esto se debe a que son muy fáciles de detectar.
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Cómo saber si tienes cáncer de piel desde casa y de manea rápida y sencilla
Para empezar, colócate frente a un espejo de cuerpo entero y desnúdate. Comprueba cada parte de tu piel, para ello puedes ayudarte de un pequeño espejo de mano. Asegúrate de tomar nota de todo aquello que veas que ha cambiado o cualquier anomalía que encuentres.
Examina cada parte de tu cuerpo, aunque sean zonas que no estén expuestas al sol. Aunque el desarrollo de cáncer de piel en las zonas no expuestas a los rayos UV es menos probable, no es imposible. Por lo tanto es necesario que compruebes su estado.
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Durante el examen, ten en cuenta el ABCDE del cáncer de piel. Debes hacerte las siguientes preguntas a la hora de estudiar cada lunar de tu cuerpo:
- A: asimetría - ¿Es asimétrico?
- B: borde - ¿Su borde no está bien definido o es irregular?
- C: color - ¿Es multicolor?
- D: diámetro - ¿Tiene un diámetro mayor que la goma de un lápiz?
- E: evolución - ¿Está evolucionando, cambiando de forma, tamaño, color o comenzando a sangrar, picar o doler?
Si la respuesta a alguna de estas preguntas es "sí", acude a un dermatólogo de inmediato para que te realice las pruebas pertinentes y te recete el tratamiento adecuado si es necesario.
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Esta pequeña autoexploración es muy fácil de realizar y te evitará muchos problemas en un futuro. Lo ideal es que lo hagas mensualmente, aunque al menos deberías hacerlo un par de veces al año.
