Seguro que la mayoría de nosotros hemos tenido que ayudar alguna vez a nuestros padres o abuelos a resolver algún «problemilla» relacionado con el uso de la tecnología. Piensan que como nos pasamos todo el día frente al ordenador, tenemos que ser verdaderos informáticos.
En muchas ocasiones, sus problemas, o más bien sus disparatadas soluciones, son tan increíbles que es imposible no verlas y partirse de risa. Si bien es verdad que la experiencia es un grado, cuando se trata de tecnología, somos nosotros los jóvenes quienes deben acudir al rescate.
A continuación te mostramos algunos de estos destellos de genialidad de nuestros mayores y la tecnología.
1- Hoy mi abuela me ha enseñado alguna de sus páginas de internet favoritas… ¡Creo que no entendió muy bien el concepto!