Todos sabemos que los bebés son personas adorables. Aportan mucha felicidad a muchas parejas que esperan su nacimiento con entusiasmo e impaciencia. Compran la ropa de estos pequeños y los muebles necesarios con una gran ilusión.
Es una especie de milagro. Cuando ves por primera vez a esa persona tan pequeña con sus pequeños dedos y sus ojos increíbles y te das cuenta que toda su vida depende de ti. Este hecho suele asustar a la gente y hacernos pensar que no estamos preparados para esa responsabilidad. Al final terminan encantados con el pequeño y comienzan el reportaje fotográfico desde que el niño es bebé. Fotos en la bañera, en la cuna, en la playa…
De hecho estos pequeños se suelen parecer bastante a sus padres o abuelos pero, ¿qué pasa cuando un bebé puede pasar perfectamente por el doble de un famoso?