Son tantas las dietas milagro y los productos disponibles para perder peso, que cada vez resulta más difícil saber lo que realmente funciona y lo que no lo hace. La mayoría de estos métodos no están comprobados, o literalmente se ha demostrado que no son la solución.
La obsesión por perder kilos en poco tiempo puede llevarnos a adoptar hábitos poco saludables y no fundamentados. No debemos olvidar que las dos claves para perder peso son: una dieta equilibrada y ejercicio moderado regular.
Los 12 mayores mitos sobre la pérdida de peso:
1- Las personas obesas no están sanas y las personas delgadas si
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Es cierto que la obesidad va asociada a un mayor riesgo de ciertas enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2, las enfermedades cardíacas o algunos tipos de cáncer.
Sin embargo, hay muchas personas que tienen obesidad y son metabólicamente sanas y, personas delgadas que padecen este tipo de enfermedades.
Parece que más que el peso, lo más importante es dónde se acumula la grasa. La grasa abdominal, la que se encuentra alrededor de los órganos es la más peligrosa. La grasa que se acumula bajo la piel, por el contrario, es más bien un problema cosmético.
2- El ejercicio es la mejor manera de perder peso
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Es cierto que hay muchos estudios que demuestran que se puede perder peso solo siendo físicamente activo. Sin embargo, es la forma más difícil de hacerlo.
El balance energético está determinado en su mayor parte por lo que comemos y por nuestro metabolismo, y en muy poca medida, por lo activo que seas.
La actividad recomendada de ejercicio físico para una buena salud es de unos 30 minutos prácticamente todos los días. Sin embargo, lo necesario para perder peso es el doble. Por ello, la mejor forma de perder peso es la combinación de una dieta equilibrada, baja en calorías y actividad física regular.
3- Los postres están prohibidos
En las dietas debe haber espacio para cualquier tipo de alimento, especialmente para los que más te gustan, siempre que controles la frecuencia con las que los consumes y la ingesta total de calorías.
Negarte tus comidas favoritas solo te llevará a comer compulsivamente y desarrollar ansiedad. Puedes pasarte, por ejemplo, en una comida a la semana y disfrutar de lo que más te gusta.
4- Las dietas de pérdida de peso funcionan
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La industria de las dietas te prometen que siguiendo sus métodos conseguirás mantenerte en forma para el resto de tu vida. Sin embargo, la realidad es bien distinta. Los estudios demuestran que el 85% de las personas que hacen dieta terminar cogiendo peso en menos de un año.
De hecho, las personas que hacen dietas son las más propensas a ganar peso en un futuro. En lugar de hacer dieta, lo ideal es cambiar el estilo de vida y convertirse en una persona más sana. Si logras comer sano, hacer ejercicio regularmente y dormir bien, la pérdida de peso vendrá sola.
5- Beber agua en las comidas engorda
El agua es un líquido que no tiene calorías, y que por tanto, independientemente del momento en el que la tomemos nunca debería suponer una ganancia de peso.
Incluso puede ser todo lo contrario, ya que a pesar de no tener calorías si que puede producir una sensación de mayor plenitud y por lo tanto, reducirnos el hambre.
Así que, aunque el agua ni engorda ni adelgaza, sí que puede condicionar un menor aporte calórico en las comidas.
6- Si haces ejercicio, puedes comer lo que quieras
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Hacer ejercicio produce una estimulación del apetito, por lo que favorece al consumo de mayor cantidad de alimentos. Este incremento en la ingesta puede anular el efecto beneficioso del ejercicio sobre el peso.
Por eso es importante que una dieta de adelgazamiento esté equilibrada en función al gasto energético del individuo, y el ejercicio adecuado a su estado físico. Además, como ya hemos dicho antes, la mayor parte del balance energético está determinado por lo que comes y por tu metabolismo.
7- Los carbohidratos te hacen engordar
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Es un hecho científico que las dietas bajas en carbohidratos pueden ayudar con la pérdida de peso. Incluso cuando no restringes las calorías que ingieres, si tomas pocos carbohidratos y muchas proteínas tiendes a perder peso.
Sin embargo, esto no significa que los hidratos de carbono por sí solos te hagan engordar. Los humanos han tomado carbohidratos desde hace miles de años y no eran obesos.
Lo cierto es que los hidratos de carbono refinados, como los granos refinados y el azúcar, sí están relacionados con el aumento de peso. Pero por el contrario, los alimentos integrales altos en carbohidratos son muy saludables y consumidos dentro de las cantidades recomendadas no te hacen aumentar de peso.
8- Solo el entrenamiento de cardio te hace bajar de peso
El entrenamiento cardiovascular es necesario a la hora de perder peso. Pero el entrenamiento de fuerza también lo es, ya que además de aumentar la capacidad funcional y prevenir enfermedades como la osteoporosis, aumenta la masa muscular.
La masa muscular necesita más energía que la grasa, incluso cuando estás en reposo. Por lo que cuanto más musculoso estés, mayor será tu tasa metabólica, y por lo tanto, más fácil te será gastar las calorías que consumes.
9- Saltarte comidas te hace perder peso rápidamente
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Los estudios demuestran que las personas que, por ejemplo, se saltan el desayuno tienden a pesar más que aquellos que no lo hacen.
Saltarte comidas no significa consumir menos calorías, ya que cuando llegue la siguiente tendrás mucha más hambre y probablemente te permitas más caprichos que si hubieses comido hace menos horas.
Por lo tanto lo ideal, especialmente para las personas que sufren diabetes, es hacer varias comidas al día de pequeñas cantidades, para mantener los niveles de azúcar en sangre estables y reducir el riesgo de hipoglucemia.
10- Los suplementos pueden ayudarte a perder peso
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La industria de los suplementos para la pérdida de peso aumenta cada día. Existen todo tipo de "pociones mágicas" que prometen acabar con los kilos de más, pero a día de hoy la eficacia de ninguna de ellas ha sido probada científicamente.
El principal motivo por el que pueden resultarle útiles a ciertas personas es lo que se conoce como el "efecto placebo". Confías en que esos suplementos pueden ayudarte a perder peso y, por lo tanto, te vuelves más consciente de lo que comes.
11- Nunca debes comer comida rápida
Es cierto que la conocida como "comida basura" no es la más saludable ni lo ideal para comer a diario. Sin embargo, debido a la mayor concienciación sobre la salud en los últimos años, muchas cadenas de comida rápida se están aventurando a ofrecer opciones más saludables.
En la mayoría de restaurantes de este tipo es posible conseguir algo de comida saludable. Aunque es cierto, como bien hemos dicho antes, que no es algo que se deba comer habitualmente, pero sí que nos puede salvar un día que no tengamos tiempo para cocinar.
12- Todas las "calorías" son iguales
Todas las calorías tienen el mismo contenido energético, pero eso no significa que todas las calorías tengan el mismo efecto sobre el peso.
Los diferentes tipos de alimentos pasan por distintas vías metabólicas y, por lo tanto, los efectos sobre el hambre y las hormonas que regulan el peso corporal pueden ser muy diferentes.
Además, las calorías de los alimentos enteros, como las frutas, tienden a ser mucho más saciantes que las calorías de los alimentos refinados, como las de los caramelos.
Las dietas exprés y los sistemas milagro para perder peso, además de no ser eficaces, ponen en peligro tu salud. Si quieres bajar de peso, consulta a un especialista, lleva una alimentación sana y una vida activa. No hay otra forma de estar delgado y saludable. Si quieres saber como perder peso, lee este artículo: "7 Efectivos trucos para adelgazar y bajar de peso".
