Cuando vamos a hacer la compra, normalmente vamos directos hacia los productos que nos interesan y pocas veces probamos alimentos distintos, salvo que su publicidad sea altamente efectiva. Como todo, el hacer la compra también tiene su parte de rutina, es por eso que cometemos ciertos errores que no sabemos que están ahí.
Ignoramos productos que son buenos por rutina
1- Elegir arroz blanco
El arroz es alto en hidratos de carbono, sobre todo en almidón. Aunque también tiene lípidos y proteínas pero en menor medida. Pero el arroz integral a diferencia del blanco, va a hacer que la digestión sea más lenta, dando mayor impresión de saciedad y evitando que comas más durante ese tiempo.
2- Ir directo a por los smoothies
Aparentemente son una opción saludable porque suelen contener fruta y verdura, lo que provoca que parezcan perfectos para el desayuno. Pero algunos estudios sugieren que estas bebidas contienen las mismas calorías que una hamburguesa porque tienen bastante cantidad de fructosa y azúcar.
Pero con los zumos verdes ocurre exactamente lo mismo o incluso peor porque se ha demostrado que aumentan los cálculos renales. Para pensárselo dos veces, ¿no?
3- Llenarte de espinacas como Popeye
Sí que es cierto que las espinacas tienen hierro, pero no por eso deberías llenar tu carrito de ellas. Pero no tienen tanto hierro como crees y además, el organismo necesita vitamina C para asimilar este nutriente. Como buena fuente de hierro es mejor optar por la carne de hígado, almejas o levadura de cerveza.
4- La carne picada de bandeja
Sabemos que es más cómodo optar por la carne ya picada en bandeja, sin embargo estos preparados están compuestos por algo que se parece y se llama burguer meat, que está repleta de aditivos.
5- Pensar que todas las conservas son perjudiciales
Caemos en el tremendo error de pensar que todas las conservas son malas. Las de vidrio son totalmente recomendables, además en cualquier caso, las conservas son normalmente bastante ricas en sodio pero se recomienda enjuagar debajo del grifo y no abusar de ellas. En el caso de los precocinados, no nos benefician en absoluto ya que suelen llevar numerosos componentes que no nos aportan nada bueno.
6- Elegir yogur desnatado
Es mejor elegir yogures normales antes que desnatados, esto es porque la grasa de los lácteos no es perjudicial para la salud porque no todos los ácidos grasos saturados son de igual calidad.
7- Comprar canela que no es 'verdadera'
Hay distintos tipos de canela, como por ejemplo la Cassia o la de Ceylán y una tiene un compuesto distinto a otras. De hecho, la primera tiene 63 más cumarina que la segunda, y el límite diario admisible es 0,1 mg por kilo de persona y esto es porque puede dañar el hígado.
8- Ir a por los ecológicos sin pensar en las consecuencias
Que las frutas y verduras sean más caras no tiene nada que ver con que sean mejores para nosotros. Pero lo más importante es que no te tires a por los ecológicos, porque también tienes que pensar en la seguridad alimentaria. Los productos ecológicos no se conservan tan bien como los convencionales.
9- Abusar de las algas
Las algas son saludables al tener pocas calorías pero si abusas de ellas puedes exceder el límite diario recomendado de yodo. El abuso de yodo se relaciona con problemas de tiroides, por ejemplo.
10- Ignorar el aceite de girasol
Aunque el aceite de oliva virgen extra tiene unas propiedades muy buenas, el aceite de girasol contiene, por ejemplo, mayor cantidad de vitamina E. Sería recomendable usar el de girasol para cocina y el de oliva para aliñar nuestros platos.
