Las relaciones de pareja siempre son bastante complicadas. Por norma general, siempre hay uno que tira más del otro y que se esfuerza más en que la relación funcione. Sin embargo, en ocasiones la dependencia que uno de los miembros de la pareja tiene del otro, es demasiado grande. El problema está en que muchas veces la persona no es consciente de que depende demasiado del otro.
Por ello, en el artículo de hoy te vamos a desvelar cuáles son las señales en las que debes fijarte si crees que eres demasiado dependiente.
10 Señales que te avisan de que dependes demasiado de tu pareja
1- Siempre haces lo que tu pareja quiera aunque no te apetezca
A cualquier plan le dices que sí aunque en realidad no te apetezca o no sea de tu agrado.
2- Sueles excusar a tu pareja cuando no se comporta bien
Aunque sepas que la culpa de algo ha sido de tu pareja, siempre tratas de excusar su comportamiento ante los demás.
3- La felicidad de tu pareja es aún más importante para ti que tu propia felicidad
Tú pasas a un segundo plano y solo te centras en hacer feliz a tu pareja.
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4- Tienes que estar resolviendo sus problemas constantemente
Cada vez que se mete en líos, ahí estás tú para sacarle.
5- Tus propios intereses y deseos te dejan de importar
Ya no tienes aficiones, ya no sueñas con conseguir esos objetivos. Ahora solo te importa que tu pareja cumpla sus sueños.
6- Sientes que tu pareja te manipula
Pienses lo que pienses, tu pareja siempre consigue hacer que veas las cosas a su manera.
7- Siempre das más de lo que recibes
Estás constantemente dándole sorpresas y a cambio solo recibes las gracias.
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8- Sientes que se aprovecha de tu bondad
No le importa hacer las cosas mal porque sabe que siempre acabarás poniéndote de su lado.
9- Cuando os peleáis, te sientes culpable aunque todos te digan que no es tu culpa
Aunque todos te digan que es culpa suya, siempre hay una parte de ti que se siente culpable.
10- Tu estado de ánimo depende exclusivamente de cómo estés con tu pareja
Solo eres feliz si sabes que tu pareja lo es.
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Recuerda siempre que tu felicidad nunca jamás debe depender de otra persona. Es normal que te preocupes por tu pareja, pero no dejes que esa preocupación pase a ser una obsesión.
Estas parejas de la ficción dependían tanto del otro que su amor, sobre el guión, salió del set de rodaje y se hizo realidad.
