¿Cuántas veces has escuchado alguna de las excusas que más usa la gente cuando les preguntas que por qué no preparan comidas más a menudo?
Todo el mundo dice que no lo hace porque no tiene tiempo. Es cierto que la cocina puede llegar a consumir mucho tiempo, pero una de las claves para que esto no te ocurra es organizarte bien. Es cierto que a veces da mucha pereza cocinar, pero hay varios métodos para ahorrar tiempo en la cocina y que cada vez te guste más cocinar.
Hoy te traemos algunos consejos para que dejes de poner excusas y empieces a cocinar.
1- Planifica tus comidas para la semana.
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Dietistas nutricionistas
Esto reduce el estrés y evita la sensación de no saber qué comer ese día.
2- Haz una lista con todo lo que necesitas.
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Cuando tengas las comidas planteadas, haz una lista de lo que necesitas y lo que ya tienes para ir al supermercado con más facilidad.
3- Escoge un día para preparar las comidas.
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Elige las comidas que pueden ser preparadas con anterioridad y elige un día para hacer todo lo que puedas.
4- Compra muchas fiambreras.
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Cuantos más tengas en casa, más platos podrás tener preparados en la nevera.
5- Limpiar conforme vas cocinando.
Si vas limpiando y recogiendo a medida que cocinas, después no tendrás que hacerlo todo a la vez. Además, cocinar te resultará más fácil cuando tengas más espacio en la encimera.
6- Tratar de almacenar lo que estés preparando en las mismas ollas donde cocinas.
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Si utilizas menos ollas y recipientes, tendrás menos cosas que limpiar.
7- También puedes preparar aperitivos.
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Frutos secos, galletas, frutas y verduras son una buena opción para tener algo para picar.
8- No se trata de usar solo el microondas.
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Hay gente a la que no le gusta recalentar las comidas en el microondas, por lo que no preparan nada por adelantado.
9- Comienza por comidas más fáciles.
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Es obvio que no vas a conseguir ser un chef de la noche a la mañana. Comienza poco a poco, con dos o tres comidas semanales para crear una rutina.
10- Recuerda que no te saldrá todo perfecto desde el principio.
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No desesperes cuando algo te salga mal. Poco a poco irás progresando para llegar a tu meta. ¡No te rindas!
Y a ti, ¿se te da bien cocinar o eres de los que pone excusas?
