La cirugía estética puede ser un arma de doble filo. Por un lado, puede ayudarnos a eliminar imperfecciones de nuestro cuerpo que nos pueden causar inseguridades, pero también pueden convertirse en un adicción peligrosa que ponga en peligro nuestra propia salud.
La adicción a la cirugía de Pixee Fox
Pixiee Fox es una chica que se ha vuelto adicta a la cirugía estética. Todo empezó cuando su amor por las Princesas Disney fue tal que decidió operarse para parecerse a sus favoritas como Ariel (La Sirenita).
La salud no es una prioridad para Pixee y lo ha demostrado tras someterse a una operación en la que se quitó seis de sus costillas. ¿El motivo? Tener una cintura de avispa que le permitiera parecerse a Jessica Rabbit.
Es de origen Sueco, pero decidió trasladarse a Estados Unidos para llevar a cabo todas estas operaciones y conseguir hacer sus sueños realidad.
Ojos, pechos, labios, mandíbula, mofletes... son algunas de las partes de su cuerpo en las que ha invertido más de medio millón de euros mediante operaciones de estética.
A sus 27 años, Pixee quiere crear su propio cuento de hadas y quiere "convertir su cuerpo en una obra de arte". ¿Lo conseguirá?
¿Crees que verá su salud más que perjudicada por conseguir hacer su sueño de parecerse a un princesa realidad? ¡Comparte esta "Princesa Disney" con todos tus amigos! Fuente Instagram