A pesar de que los perros pueden llegar a ser los animales más afectuosos que conocemos, en ocasiones pueden tener algunos problemas para hacer nuevos amigos.
Por ejemplo, se puede convertir en un verdadero hándicap el hecho de crear nuevas relaciones cuando te enfrentas a una discapacidad física que te impida mantenerte al día con tus compañeros en buena forma, ya que no les puedes seguir el ritmo.
Para una perra llamado Kolima, que sufre el síndrome de Wobbler, interactuar con los otros cachorros y animales en su refugio era casi imposible.
Había entrado en una especie de depresión. Estaba sumida en una tristeza constante y ninguna de las otras perras quería jugar con ella. Por suerte para Kolima, ¡encontró a un amigo inesperado!
Paolo, este cariñoso burro se hizo amiga de ella desde el primer momento en que llegó al refugio, y desde entonces son inseparables. Además, Kolima está mucho más alegre y siempre está jugando con él.
Es maravilloso cuando al final las historias tienen un final feliz. Es muy hermoso ver a estos dos animales tan diferentes tener una amistad tan bonita.
Esta perra sufrió un cambio drástico en su vida para mejor al encontrar a este compañero bueno y cariñoso, para hacerle los días felices y darle el amor que necesitaba.
En el siguiente vídeo puedes ver a la peculiar pareja en acción y seguro que te sacan una sonrisa.
¡No dudes en compartirlo con tus amigos y familiares! https://www.facebook.com/felicecaputo/videos/10154594765780961/