A menudo nos olvidamos de lo afortunados que somos. Deberíamos estar más agradecidos por las cosas que tenemos en la vida. Siempre es mejor pararse a pensar, echar un vistazo hacia atrás, y tener en cuenta lo que de verdad es importante, y quitarle importancia a las cosas triviales de la vida.
El siguiente vídeo puede servir como un gran ejemplo para que nos haga pensar y valorar todo lo bello que la vida tiene que ofrecernos. Con la ayuda de Gritta Goetz, estos perros adorables, que por desgracia sufren diferentes discapacidades, son capaces de correr libremente en el campo con la ayuda de sus sillas de ruedas.
Gritta Goetz posee un Refugio de animales en Lanzenheiner, Alemania. Un refugio en el que habitan más de dos docenas de perros. Varios de los perros que viven en este refugio dependen de sillas de ruedas, pero ello no les impide llevar una vida normal como el resto de sus compañeros.
Como podrás ver en el vídeo, a pesar sus discapacidades, son capaces de alcanzar la misma velocidad que sus amigos sanos cuando se trata de jugar todos juntos en el aire libre.
Los perros de Goetz pueden servir como un gran recordatorio cuando se trata el tema de la reinserción de personas discapacitadas. Las crías que solo tienen dos patas se mantienen al día con sus amigos que tienen cuatro patas, y realmente no hay ninguna diferencia entre ellos.
Con la ayuda de Goetz, estos perros son capaces de vivir el resto de sus vidas en un entorno natural, con amor, cuidado y, por supuesto, un amplio tiempo de juego.
También es una muestra de superación y esperanza para todas aquellas personas que tengan una discapacidad física para que vean que se pueda llevar una vida normal a pesar de las dificultades.
¡No dudes en compartirlo con tus amigos y familiares!