No todos los días se puede ver algo como esto. Y a medida que esta madre primeriza comenzó a recuperarse del dolor de dar a luz, estaba un poco preocupada cuando vio que el médico empezó a cuchichear con sus compañeros.
Pero no era nada grave de lo que preocuparse, porque el equipo de médicos estaban presenciando de hecho algo muy muy raro y que ocurre en pocas ocasiones. El recién nacido, cuando salió del vientre de su madre, todavía estaba nadando en el saco amniótico. Técnicamente, el bebé aún no había nacido oficialmente, y todavía no había tomado su primera bocanada de aire fresco.
Sin embargo, en raras ocasiones, este saco protector se las apaña para salir sin romperse. Y mientras los médicos ven al bebé moviéndose dentro, podemos comprobar la verdadera magnitud del milagro que significa dar a luz a un bebé. Mientras el pequeño mueve sus pequeñas manitas, no puedes parar de sorprenderte de lo increíble que es el mundo.
Finalmente, los médicos abrieron con cuidado el saco y liberaron al bebé, que inmediatamente comenzó a respirar y empezó a retorcerse descubriendo este nuevo lugar. ¡Bienvenido a este mundo pequeñín!
Atención: este vídeo contiene un nacimiento en directo, lo que podría ser algo molesto para algunos de vosotros
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