Un hombre de 39 años ha decidido cambiar completamente su vida para convertirse en un mejor padre y esposo para su familia. En solo seis meses, su determinación y esfuerzo han logrado unos resultados tan increíbles, que su familia apenas lo reconoce.

En agosto, el comerciante de antigüedades con sede en Montana, Jeremiah Peterson, se fue de mochilero a un lago de montaña con sus hijos. Cuando volvieron, el padre confesó:

"en vez de recordar todos los buenos momentos que habíamos vivido durante el viaje, todo lo que puedo recordar es algo que siempre se repetía en mi cabeza una y otra vez: me faltaba el aliento y tenía que realizar descansos frecuentemente, incluso antes que mis hijos de 9, 7 y 6 años".

Combinando una estricta dieta y un ejercicio regular intenso, el hombre comenzó su transformación. "No tengas miedo de eso, no te escondas de él. Mira tu gordo trasero en el espejo y decide quién va a ganar ".

Durante medio año, pasó dos horas caminando y una hora en el gimnasio todos los días. Después de este productivo tiempo, Jeremiah había perdido 38 kg, y pasó de la talla 42, en sus vaqueros, a la 33.

"Pasé de tener una barriguita cervecera típica de un padre a tener un físico de chico universitario", contó Jeremiah a Daily Mail.

"Desde que empecé a adelgazar, me encontraba mejor, mi pelo y piel parecían más sanos, puedes ver mi mandíbula en lugar de mejillas regordetas y, ahora tengo abdominales".

Jeremiah agradece a sus hijos por haberle motivado a realizar cambios en su estilo de vida. "No solo transformes tu físico, sino la manera en la que piensas y sientes, así como también el futuro que deseas para tu familia. Sé que si yo puedo hacerlo, cualquiera puede".