El antiguo líder de una banda de supremacía blanca, Bryon Widner, ha vivido siempre rodeado de violencia y odio. Cansado de vivir en un entorno tan hostil e impulsado por sus hijos, quiso darle un giro de 180 grados a su vida.
En ese momento lo que más deseaba era poder ser un modelo a seguir para sus hijos. Bryon decidió que era hora de librarse de los tatuajes que le habían acompañado desde hace años y que le impedían deshacerse de su pasado.
Conoce la inspiradora historia de Bryon, el antiguo líder de una banda de supremacismo blanco que quiso recuperar su vida.
Durante una época en la que el odio era lo que dominaba su vida, Bryon encontró en los tatuajes racistas una forma de expresar sus ideales y reivindicar sus pensamientos radicales. Los tatuajes se extendían por todo su cuerpo, hasta en su propio rostro.
Como era de esperar, esos tatuajes le dificultaron muchísimo la tarea de encontrar trabajo. Multitud de cruces de hierro y esvásticas adornaban partes del cuerpo que no podían ser tapadas, por lo que fue rechazado en cualquier trabajo que necesitase estar de cara al público.
Después de pasar algún tiempo en prisión y contraer matrimonio con su esposa Julien en 2006, Bryon decidió abandonar el camino que había envenenado su vida.
Estaba dispuesto a hacer lo que fuese necesario para eliminar de la cara todos los tatuajes que se hizo cuando era miembro de la pandilla de Skinheads.
El deseo de purgar el odio de su corazón era tan intenso que estaba dispuesto a recurrir a cualquier solución. En una entrevista, Bryon dijo, "Estaba incluso dispuesto a sumergir mi cara en ácido si era necesario."
Esta fue una decisión que Bryon tomó con el apoyo de Julie, quién también estuvo involucrada en el mismo movimiento como miembro de la Alianza Nacional.
"Habíamos dejado el movimiento, teníamos una bonita vida familiar, teníamos mucho por lo que vivir, solo quería que alguien nos ayudara", explicó Julie.
La pareja pidió ayuda incluso en los lugares más insospechados. Daryle Lamont Jenkins, un hombre negro directamente involucrado con un movimiento que promueve la paz y desecha el odio decidió ayudarles.
Jenkins luchaba día a día intentando eliminar el supremacismo blanco que Bryon defendió en el pasado; pero escuchó el grito de auxilio de la pareja que simplemente quería empezar de nuevo.
Jenkins los puso en contacto con T.J Leyden, una antigua supremacista blanca que también consiguió alejarse de esa vida de odio. Fue ella la que llevó a Bryon al Southern Poverty Law Center (SPLC) donde le hicieron una propuesta que no podía rechazar.
Allí le ofrecieron un trato. Si Bryon hablaba en las conferencias que daba la policía contra este tipo de bandas, le costearían las intervenciones necesarias para eliminar sus tatuajes.
Pero no fue fácil; la familia recibió amenazas de muerte por parte de su antigua pandilla cuando Bryon decidió ponerle fin.
Daily MailUn donante anónimo se hizo cargo de los 35.000 dólares que Brion necesitaría para pagar todas las cirugías necesarias para eliminar los tatuajes de su cuerpo, que pasarían a ser parte de su pasado.
Como puede verse en la siguiente imagen, tras las primeras intervenciones quirúrgicas ya se comenzaba a apreciar cierta diferencia. Poco a poco, los signos de su pasado iban desapareciendo.
Tras 25 intervenciones, Bryon estaba completamente libre de tatuajes. Las marcas de su vida anterior no era más que un viejo recuerdo.
Bryon es ahora un modelo para su hijo de cuatro años Tyrson y su hijastra Isabella.
Tras estar libre de tatuajes en su rostro, Bryon apareció en un documental sobre su largo y duro viaje llamado "Erasing Hate" (Borrando el odio).
Aquí podemos ver a la pareja recibiendo un gran aplauso tras el estreno del inspirador documental.
En un momento muy conmovedor después de una de las proyecciones, Bryon comentó cómo una mujer negra se acercó a él y le dijo: "Te perdono".
Tras un largo periodo de autorreflexión y honestidad consigo mismo, Bryon finalmente consiguió abandonar por completo la ideología del movimiento. Había alcanzado su objetivo.
Incluso después de una larga vida de odio y violencia, la paz y el amor encuentran el camino. ¡Cualquier problema en la vida tiene solución si te lo propones!