Cuando el hombre de la casa es todo un manitas, todo son ventajas. Emily, cansada de su antigua cocina, decidió remodelarla por completo con la ayuda de su marido.
La sorpresa se la llevó cuando éste, tras instalar los nuevos armarios de la cocina, cogió los antiguos y los convirtió en algo totalmente original y fabuloso.
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Transformó los muebles de la cocina en unas fantásticas camas para sus hijos.
Ya que los muebles iban los iban a tirar la basura y los niños necesitaban espacio de almacenamiento en su habitación, la decisión estaba clara.
Primero cogieron los muebles y les añadieron un fondo y una tabla lisa para crear la superficie de una cama bien grande.
Gracias a las dotes de carpintero del padre, pudo hacer una estructura para la cama que da la impresión de que la cama está dentro de un viejo armario.
La pareja no escatimó en detalles para que sus pequeños tuvieran la sensación de estar en su propio castillo.
El proceso de construcción fue todo un evento para los más peques.
Ahora, los esfuerzos se duplicaban, ya que no solo tenían que hacer una cama, si no DOS. Una para cada hijo.
La pequeña de la casa se decidió por el verde y un rosa intenso en el interior.
Gracias a su madre, no faltaban detalles. Una bonita lámpara.
Y una pequeña estantería a los pies de la cama para poder guardar todos los libros que lee antes de irse a dormir.
Su hermano se decidió por un gris más neutro, y le dio el toque divertido con la colcha y los peluches.
Además de una alfombra con lunares de lo más calentita.
Los tres hermanos disfrutan de su nueva cama, y la más pequeña espera la suya con ansia.
Aunque la reina indiscutible de la casa, toma posesión de ambas cuando le parece.
Si tu dormitorio también necesita un cambio pero no eres tan manitas como nuestro protagonista no te preocupes, aquí te traemos una forma de transformar tu vieja cómoda con un poco de cinta adhesiva.
¡Comparte esta fabulosa forma de reciclar los muebles de la cocina! Fuente: Offract