Los puso dentro de una cesta y se fue al veterinario más cercano. Sus cuerpos estaban cubiertos de garrapatas y él sabía que necesitaban ayuda tan pronto como fuera posible.
Por desgracia, uno de los tres gatitos no sobrevivió.
Pero todavía dos hermanos sí que tuvieron la oportunidad de recuperarse.
Hamdan los llevó a un hospital especializado en el tratamiento de animales salvajes.
Los veterinarios determinaron que tendrían unas de cinco semanas de edad.
Los médicos les dieron todo lo que necesitaban para recuperar su salud.
Su principal objetivo era aumentar el peso de los gatitos y luego liberarlos nuevamente dentro de la selva cuando estuviesen lo suficientemente fuertes como para hacerlo por su cuenta.
Muy pronto, los gatitos empezaron a comer.
Su peso comenzó a aumentar …
… con mucho apetito!
A este ritmo, muy pronto estarán lo suficientemente sanos como para volver a la naturaleza.
Así es un gato salvaje adulto. Tan sólo 600 viven actualmente en Israel, es importante asegurarse de que todos ellos están sanos para que la especie pueda continuar.
No pasará mucho tiempo hasta que haya 602 gatos salvajes que vivan en las selvas de Israel.
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Fuente: wimp