Tal vez lo hagas por simple costumbre o tal vez lo hagas para calentar antes de escribir, jugar a la consola, tocar el piano... ¿Quién sabe? La realidad es que todos lo hemos hecho alguna vez en nuestra vida, todos nos hemos crujidos los dedos de las manos para intentar aliviar en cierta manera esa sensación de agarrotamiento de nuestras articulaciones.
Seguramente hayas escuchado más de una vez que crujir de esa forma los dedos es muy negativo para las articulaciones o que es una forma de aumentar la probabilidad de padecer artritis en el futuro.
Tiene sentido, ¿no? Apretar los dedos hasta que se oye ese chasquido debe ser muy malo para los cartílagos de las articulaciones ¿no crees?
Bueno, pues en realidad no. Tal y como ocurre con muchos mitos sobre la salud, éste se ha convertido en uno de los más extendidos entre la sociedad. Pero entonces ¿por qué oímos esos chasquidos? y lo más importante, ¿en qué repercute en nuestro cuerpo?
¿Es realmente negativo crujirse los dedos?
Si eres de los que se crujen los dedos, probablemente hayas oído que puede dañar las articulaciones, pero ¿qué está pasando realmente cuando te crujes los nudillos?
¿Están crujiendo realmente mis huesos?
Muchas personas piensan que el sonido que escuchamos al crujir los nudillos verdaderamente es producido por algún tipo de fricción entre los huesos.
Pues aquí vienen las buenas noticias. No tiene nada que ver con los huesos.
Entonces, ¿Qué es lo que produce el sonido?
En cada una de las articulaciones existe algo llamado líquido sinovial, un fluido con la consistencia de la clara de huevo.
Este líquido actúa como lubricante entre los huesos para facilitar su movimiento y juega un papel clave en el chasquido que se escucha cuando crujes los nudillos.
A pesar de que suena como un ruido producido por el roce de algo sólido, en realidad proviene de algo líquido.
¿Hacer estallar ese líquido puede causar algún daño?
Se solía pensar que el sonido era producido al hacer estallar las burbujas de gas que integraban el líquido sinovial, pero el año pasado gracias a un video de rayos X se pudo demostrar que el sonido de la explosión proviene en realidad de un vacío que se forma de repente en el líquido sinovial.
Es decir, el sonido se produce al separar los huesos produciendo así una cavidad hueca de forma repentina en el espacio que ocupa el líquido sinovial.
¿Puede causar artritis?
Las personas suelen pensar que al crujir los dedos se desgastan las articulaciones, lo que puede generar problemas de artrosis en el futuro.
Si bien hay factores que puede conducir a la artritis, como lesiones o trabajos manuales duros y continuos, crujirse los dedos no forma parte de ninguno de los factores de riesgo.
¿Qué dicen los estudios?
En 2011 se realizó un estudio donde se demostró que no había relación entre el chasqueo de nudillos y el desarrollo de artritis. Más tarde se determinó que la osteoartritis aparecía más bien por realizar movimientos repetitivos.
¿Pero qué ocurre a largo plazo?
Un doctor llamado Dr. Donald Unger realizó un experimento por su cuenta para comprobar si efectivamente crujirse los dedos derivaba en artritis.
Este doctor se crujió solo los dedos de su mano derecha durante 60 años, dejando la mano izquierda inmaculada.
A los 60 años, el doctor Unger comprobó que poseía la misma fuerza y la misma flexibilidad en ambas manos.
¿Existe alguna consecuencia por crujirse los dedos?
Aunque es cierto que crujirse los nudillos no aumenta las posibilidades de padecer artritis en las manos, sí que existen algunas consecuencias.
Los estudios han demostrado que si se realiza demasiado a menudo puede llegar a provocar una disminución de la fuerza de agarre, además de que puede poner en riesgo algunos ligamentos de los dedos.
Si eres de los que crujen los nudillos, hazlo con suavidad y no lo hagas con mucha frecuencia en cualquier caso.
Además, no olvides que ese característico sonido no es del agrado de todas las personas, por lo que puede ser visto como algo desagradable por los demás.
