Nunca habíamos pensado las graves consecuencias que podía tener el simple hecho de peinarte de una forma determinada durante tantos días, por eso la historia que te mostramos a continuación te dejará con la boca abierta.
Diva Hollands durante toda su infancia estuvo practicando ballet, lo que implicaba que tenía que llevar su pelo recogido constantemente.
Hollands asegura que lo llevó así durante años y que si se comparan las fotografías a lo largo de los años puede verse el cambio que se ha producido en su cuero cabelludo como consecuencia de ello.
La línea donde su pelo nacía empezó a retroceder cada vez más, lo que llevó a que sufriera acoso en el colegio.
'Sufrí bullying cuando estaba en el colegio, pero la cosa empeoró muchísimo cuando llegue al instituto. Era perfectamente consciente de lo que me pasaba y no podía esconderlo. Me afectaba muchísimo, recuerdo todas las palabras que me decían, como por ejemplo que tenía la frente del tamaño de un campo de fútbol. Se convirtió en un gran problema en mi vida'.
Hollands dejó el baile a los 18 años pero su pelo no volvió a crecer. Cuando conoció a su actual marido, se negó a enseñarle como tenía de verdad el pelo cuando se lo recogía. Durante seis meses escondió este secreto, pero cuando por fin se atrevió a contárselo, él se mostró realmente comprensivo.
Después de dos embarazos, la pérdida de pelo empeoró y fue cuando decidió que era hora de hacer algo al respecto.
Fue el doctor Edward Ball el encargado de realizarle un procedimiento llamado Transplante folicular. Era el mejor cirujano en este campo y todo salió fenomenal.
En las últimas fotografías se puede apreciar que el resultado es impecable y ahora la vida de Hollands es diferente. Afirma que su vida ha cambiado por completo y que ahora quiere compartir su historia para ayudar a otros que sufren el mismo problema.