Una mujer de Kuwait se dio cuenta de que algo no iba bien cuando un día regreso a casa del trabajo y vio que su marido se sorprendió mucho al verla.
El hombre parecía nervioso, como si la presencia de su mujer le causara cierta ansiedad, como si tuviese miedo de ser pillado haciendo algo que no debería de estar haciendo.
De acuerdo con Arab Times, la mujer sospechaba que su marido mantenía un romance con alguna mujer. Desafortunadamente, sus sospechas cobraron fuerza con el paso de las semanas pero no tenía ninguna prueba que evidenciara su suposición.
Fue entonces cuando el loro de la pareja también comenzó a actuar de manera extraña reproduciendo sonidos y palabras que normalmente no hacía.
Cuando la mujer se detuvo y prestó atención a lo que el loro decía supo la verdad...
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Durante semanas, una mujer casada de la ciudad de Kuwait sospechaba que su marido le estaba siendo infiel.
Cada vez que volvía a casa demasiado temprano su marido actuaba de manera nerviosa y rara.
Mientras más reparaba en el comportamiento de su marido, más segura estaba de que algo no andaba bien.
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El pájaro empezó a imitar el comportamiento que últimamente practicaba su dueño. Repetía frases de coqueteo y reproducía susurros amorosos.
La mujer se dio cuenta de que su marido nunca le había dicho esas cosas a ella, por lo que así confirmó sus sospechas.
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Tras un poco de investigación, la mujer comprendió que su marido estaba manteniendo un romance con la señora de la limpieza que se encargaba de ir a casa a "limpiar" mientras ella salía a trabajar.
Los loros son capaces de imitar el habla humana, y el loro gris africano puede incluso asociar palabras con sus significados y formar frases simples.
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La mujer, quien permanece en el anonimato, denunció la infidelidad de su marido a la policía. Sin pensarlo dos veces, utilizó las afirmaciones de su mascota como pruebas que evidenciaban la infidelidad.
Si bien el adulterio es ilegal en Kuwait, las autoridades dijeron que las palabras del loro no tendrían validez como prueba.
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Esta no es la primera vez que un loro tiene una historia que contar. En 2006, un loro gris africano llamado Ziggy reveló a su dueño, Chris, que su novia le estaba engañando.
Según la NBC, Ziggy habría gritado, "¡Te quiero, Gary!", revelando así la identidad del amante secreto de su mujer.
Al parecer, el pájaro también reproducía el sonido de un beso cada vez que el nombre de Gary era mencionado en la televisión.
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Cuando Chris confrontó a su novia al respecto, esta admitió que mantenía un romance con su compañero de trabajo, Gary.
Aquella misma noche, la mujer se mudó y la pareja se separó.
Chris dijo en una entrevista a la NBC, "Sin duda mi querido Ziggy cuida de mí".
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