La mayoría de las personas se casan enamoradas y convencidas de que su matrimonio durará para siempre, pero la triste realidad es que el 45% de los matrimonios terminan en divorcio.
Aunque es cierto que hay miles de experiencias personales, los expertos en relaciones seleccionan algunas cosas que aumentan las probabilidades de que exista un divorcio.
8 aspectos que pueden aumentar la probabilidad de un divorcio Los hábitos de alcohol de los cónyuges no coinciden
Que uno de la pareja quiera salir a tomar una copa de vino y el otro prefiera mantenerse sobrio causará problemas en el futuro. Un estudio de la Universidad de Buffalo demuestra que el 50% de este tipo de parejas se divorcia antes del décimo aniversario.
Belleza física
Las parejas guapas tienen más dificultades para permanecer juntas, ya que el atractivo físico está relacionado con una mayor probabilidad de separarse.
Te quedaste embarazada muy rápido
Las mujeres que tienen un bebé al menos ocho meses después de la boda, tienen matrimonios más duraderos que las mujeres que tuvieron al bebé antes de la boda o durante los primeros siete meses.
No terminaste la universidad
Las mujeres y hombres que terminaron los estudios universitarios cuentan con un mayor porcentaje de que sus matrimonios duren más que los que no.
Te has divorciado antes
Un segundo o tercer matrimonio tiene muchas menos probabilidades de que funcione, y menos a largo plazo. El 40% de los segundos matrimonios termina antes de los 10 años. Esto no quiere decir que existan ocasiones en las que el segundo o tercer matrimonio acaba siendo el definitivo.
Tus padres se divorciaron
El divorcio es mucho más común en hijos de padres divorciados. Esto puede tener mucho más que ver con la propia naturaleza que con la forma de criar a tus hijos, ya que hicieron un estudio en hijos adoptados y encontraron que los patrones eran más similares a los de sus padres biológicos que a los de sus padres adoptivos.
Te casaste joven
Las creencias populares decían que cuanto más tarde te cases, más fuerte será tu vínculo. Pero las estadísticas muestran que la edad ideal para casarse es entre los 20 y 32 años. Si lo haces antes o después de ese periodo, aumentarías el riesgo de divorcio.
No tuviste educación religiosa
Según los datos de estadísticas nacionales de salud, las mujeres que crecieron en hogares religiosos tienen más probabilidades de quedarse con su cónyuge que las mujeres sin una educación religiosa.
Todos estas cosas afectan a la duración de tu matrimonio. Aunque algunos factores están fuera de tu control, hay otros en los que puedes tomar medidas y conseguir que tu matrimonio dure más tiempo.
Fuente: Huffingtonpost | Sheknows | Aol | Msn Imagen de portada: Antonio Guillem / Shutterstock