Tan solo escuchar la palabra parásitos nos da escalofríos, pero debes saber que hasta la persona mas sana del mundo puede tener parásitos en su cuerpo.

Incluso puede que les suceda a niños que están demasiado protegidos, ya que su sistema inmunológico es más débil y esto hace que se enfermen con más facilidad.

Viajar a otro país, ir de excursión y acampar o cualquier cosa que implique sumergirse en un nuevo entorno, algo sucio o muy cercano a la naturaleza, aumenta el riesgo de contraer infecciones bacterianas o parásitos.

Lo mejor que puedes hacer para evitar tenerlos es cuidar tu alimentación y realizarte chequeos médicos rutinarios para vigilar la presión arterial, los niveles de colesterol, el recuento de plaquetas, los niveles de minerales, etc. También es importante que no te automediques.

Si quieres tomar algo por tu cuenta lo ideal es que sean suplementos naturales, como píldoras de vitaminas y minerales cuidadosamente extraídos que nuestros cuerpos producen y aceptan naturalmente.

4 Señales de que tu cuerpo tiene parásitos o toxinas 1- Problemas digestivos

Si llevas una dieta bastante saludable y los dolores de estómago son insoportables, puede que sea un síntoma de que tienes parásitos en el cuerpo.

Puede que sea por la hiperacidez, una gastritis causada por la falta de fibra, un desequilibrio en el pH del intestino, una infección bacteriana o viral o por la mala alimentación. Sea lo que sea, sigue manteniendo una dieta equilibrada y bebiendo mucha agua para fortalecer tu cuerpo.

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Las toxinas que generan los parásitos hacen que nos sintamos constantemente cansados.

3- Pérdida de peso, de músculo y de grasa

Si sigues llevando el mismo ritmo de vida y estás perdiendo peso sin ningún motivo aparente, probablemente sea porque tienes parásitos en el cuerpo.

4- Deficiencia de hierro o anemia

Si llevas una dieta equilibrada y los análisis han revelado que tienes deficiencia de hierro, probablemente tengas parásitos en tu organismo.

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• Evita consumir ultraprocesados y bebidas con muchos ingredientes artificiales y demasiados azúcares procesados.
• La sal y las grasas trans también debes eliminarlas de tu dieta.
• Haz ejercicio regularmente para fortalecer tu sistema inmune.
• Aumenta tu consumo de verduras y frutas.
• Toma suplementos naturales de vitaminas y minerales siempre y cuando te lo aconseje el médico.
• Añade vinagre a tus comidas, es un potente antibacteriano que te ayudará a limpiar tu organismo.

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