Durante el día, Adam trabaja como un diseñador de páginas web, con lo que trata de ganarse el sueldo en Vermont.
Sin embargo, cuando llega la noche, este padre de dos pequeñas y adorables niñas se convierte en un apasionado del bricolaje, y comienza a construir cosas volviéndose muy creativo con sus propias manos.
Hace un tiempo, a Adam se le ocurrió una fantástica idea que pensó que sería perfecta como regalo para sus hijas, y decidido a ello, se puso manos a la obra reuniendo todas sus habilidades como manitas y convirtiéndose en el padre más guay del planeta.
En el siguiente vídeo que podrás ver a continuación, este padre transforma la habitación de sus hijas en un impresionante árbol de forma muy económica. Se aseguró de grabar todo el proceso con un épico time lapse que documenta todos los pasos que desarrolló durante el proyecto.
Esta obra de bricolaje tiene muchos puntos geniales, como una red que sirve de hamaca, para trepar y relajarte, tiene armarios para almacenar cosas, y un acogedor escondite al cual se puede acceder desde el suelo. Lo creas o no, consiguió construirlo todo en sólo 2-3 días.
Al final, Adam lleva a sus niñas a su nueva habitación y les dice que abran los ojos. Por supuesto, la fascinante transformación del dormitorio es recibida por gritos y llantos de alegría.
"¡Deberíamos enseñarle esto al Presidente!" decía una de las niñas. Pero mi frase favorita fue "Papi, de verdad quiero comprarle esta casa... a mis hijos"... ¡Jajajaja!
¿Qué te ha parecido esta fantástica idea? Padres como este nos demuestran que el amor por los hijos no tiene límites. Y además, se trata de un proyecto con el que puedes conseguir un resultado realmente sorprendente y sin gastarte un dineral en ello.
¡Comparte esta increíble transformación de la habitación con tus amigos y muéstrales lo que se puede hacer con un poco de creatividad!