El vientre es probablemente una de las áreas más problemáticas del cuerpo cuando se trata de perder peso. Todos nosotros soñamos con tener un abdomen plano y tonificado, pero a nadie le gusta hacer abdominales.
¡Ya no hay excusas! ¡Tenemos la solución perfecta para ti!
Este ejercicio se llama "la tabla" o "la plancha" y consiste en soportar tu peso sobre tus manos y la punta de tus pies mientras tu cuerpo está recto como una tabla, de ahí su nombre. Es la manera perfecta de conseguir un vientre plano y resistente.
Si realizas este ejercicio varias veces a la semana durante 10 minutos, obtendrás mejores resultados que si realizas 1.000 abdominales.
Para realizarlo correctamente sigue estos pasos.
Presiona las palmas de tus manos o los codos firmemente contra el suelo. Alinea tanto las manos (o codos) como las rodillas con los hombros. Tu cuello debe estar bien estirado con la nariz apuntando hacia el suelo.
Aunque la atención se centra en los músculos abdominales, también debes sentir cómo trabajas también las piernas. Para ello estira bien las piernas y apóyalas en el suelo únicamente sobre los dedos de los pies con el fin de activar los músculos de los cuádriceps.
No levantes los glúteos, mantenlos abajo para que tu cuerpo sea una línea recta.
Aprieta los músculos abdominales y mantente de 20 a 60 segundos en esa posición. Mientras más aguantes mejor.
Inhala y exhala aire de manera normal para poder mantener esta postura más fácilmente.
Quizás mantener esta postura te sea más fácil si te imaginas que tienes un vaso de agua haciendo equilibrio en tu espalda.
Cuando no puedas más, dobla las rodillas, apoya todo el cuerpo en el suelo y descansa 15 segundos.
Repite el ejercicio 3 veces al día 3 o 4 veces por semana y verás los resultados.
Para ver más ejercicios para conseguir un vientre plano puedes ver el siguiente vídeo: