Andrew Taylor, de Melbourne, tenía sobrepeso y se consideraba adicto a la comida. Para luchar contra su adicción y conseguir bajar sus 151.7 kg decidió tomar medidas drásticas en sus hábitos alimenticios: comer solo patatas.
Aunque cualquier nutricionista le diría que es una auténtica locura, el defiende: "ha sido el mejor año de mi vida".
La increíble transformación de un hombre que solo comió patatas durante casi un año
El joven australiano afirmó que todo comenzó cuando aceptó que tenía un problema con la comida, sentía una gran dependencia de ella.
Por eso, decidió dejar de comer todo tipo de alimentos exceptuando patatas y batatas, sin importar cómo estuvieran preparadas. Eso sí, condimentadas con especias y leche de soja con calcio.
Así empezó lo que él mismo llama 'Reto de la Patata En Forma Que Puedes Hacer Tú Mismo' (‘DIY Spud Fit Challenge’), y que duró 313 días.
Según sus propias declaraciones, las patatas le han ayudado a perder 55.2 kilogramos de peso en seis meses sin hacer mucho ejercicio. A partir de entonces, empezó a combinarlo con bicicleta, y logró un increíble cambio.
"Tengo que reconocer que tengo problemas controlando lo que como. Pienso que soy un adicto a la comida. Y mientras que un adicto a las drogas o al alcohol, lo mejor que puede hacer es dejarlas, por desgracia esto no es posible con la comida: hay que comer. Así que pensé qué podía hacer y dije que podía escoger una única comida y solamente comer eso", explicaba en su primer vídeo.
Aunque a cualquier nutricionista le parecería una aberración, él asegura: "Obtengo el 600% de mis necesidades diarias de hierro y más del 400% de vitamina C, además de fibra". La única preocupación radicaba en el calcio.
"Las papas tienen calcio, pero tal vez no lo suficiente. Entonces, para asegurarme, usé leche de soja orgánica fortificada para hacer puré de papas", explica.
Para añadir sabor a sus comidas, utilizó una pizca de hierbas secas, chile dulce sin grasa o salsa barbacoa. Y debido a que su dieta carecía completamente de carne, la complementó con vitamina B12. En general, bebió agua, aunque en ocasiones optó por la cerveza.
"Mi salud no hace más que mejorar. Tenía el colesterol alto pero ahora ha bajado, mi presión arterial también, igual que mis niveles de azúcar. Cada vez que me hago un análisis de sangre, sale mejor".
De hecho, ya tiene listo un retiro de la patata para los participantes que quieran pasar una semana comiendo tubérculos y haciendo yoga. Y es que ahora Andrew Taylor se propone como life coach.
A pesar de los buenos resultados de Andrew con su dieta que duró 313 días, los especialistas no recomiendan hacer este tipo de cambios en la alimentación, ya que lo recomendable es tener una ingesta de alimentos variada y equilibrada.