Existen muchos tópicos y discusiones acerca de cuál es la mejor forma de educar a nuestros hijos. Existen muchos colegios que desarrollan distintos métodos que van abarcando desde los ciclos de sueño de nuestros bebés, hasta dejar a nuestros hijos ir al colegio por sí solos.
Pero hay otro tipo de problemas que como padres no podemos resolver, ya que se escapan de nuestro conocimiento.
Por ejemplo, existe uno sobre el cual se ha creado mucho debate. ¿Es mejor dormir con tu bebé en el mismo cuarto donde duermen los padres? ¿O, por el contrario, es mejor dormir separados?
El sueño es, en definitiva, uno de los pilares de nuestra vida, y es especialmente importante para los recién nacidos y para aquellos bebés y niños que están constantemente jugando y aprendiendo cosas nuevas sobre la vida.
La forma y duración de cómo duerme un bebé puede tener un gran efecto a largo plazo en su crecimiento, especialmente en el desarrollo físico de su cuerpo.
Por eso, te vamos a enseñar en este artículo los principales riesgos físicos que puede sufrir un bebé si se coloca en una mala postura a la hora de dormir en su cuna:
Cuando un bebé nace en el hospital, lo trasladan a una incubadora o a cunas hospitalarias.
Estas especies de cunas con una estructura de plástico aparentemente incómodas, están en realidad pensadas para proporcionar en una postura óptima para el bebé, y para almacenar todos los utensilios necesarios para el cuidado del bebé para que estén siempre a mano.
Siguiendo el consejo de especialistas, los bebés, y en especial los recién nacidos, deben ser puestos en la cuna boca arriba, reposando completamente su espalda en una superficie firme pero sin ser totalmente dura.
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Los doctores han confirmado que no debe haber más elementos dentro de la cuna más que el colchón, la manta, sábanas, almohada y peluches.
Poner al bebé boca arriba, reposando sobre su espalda y deshaciéndonos de elementos blandos protege al bebé de peligros como la asfixia y del síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).
Estos riesgos son comúnmente explicados en los hospitales a los padres, pero existe otra gran razón debemos poner a nuestros bebés en esta posición en la cuna.
Los bebés nacen con una fontanela o "mollera", una especie de hundimiento en la parte frontal de la cabeza, justo arriba de la frente. Esto es totalmente normal, ya que la cabeza del bebé en ese momento está formado por una serie de huesos unidos por tejidos flexibles que facilitan el paso de la misma en el parto. Gracias a esto, se permite que la su cabeza se vaya formando poco a poco.
Por norma general, y en un proceso que dura 18 meses, se irán uniendo los huesos hasta que se forme una cabeza naturalmente redondeada.
Sin embargo, para que el cráneo se forme correctamente y de forma redondeada, el bebé debe poder moverse libremente sobre su cabeza mientras que los músculos del cuello se van desarrollando.
Dormir en un colchón firme y plano es altamente beneficioso porque permite al bebé cambiar de posición en el transcurso de su ciclo de sueño.
De la misma forma se mejora la fuerza de su cuello y los músculos de su espalda.
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Las mecedoras y asientos de coche son maravillosas para hacer dormir a nuestro bebé, ya que realmente ellos notan la seguridad de estar bien atados y saben que no se pueden caer.
Sin embargo, dicho lo anterior, no debemos mantener dormidos a nuestros hijos en esos sitios, ya que apoyan la cabeza hacia un lado, impidiendo que la muevan de forma natural y libre.
Esto puede conllevar numerosos problemas, uno de los más preocupantes es el síndrome de la cabeza plana, donde la fontanela se desarrolla de forma plana, sesgada o torcida.
Esta condición, afortunadamente, puede ser remediada si se trata a tiempo.
Los bebés más jovenes simplemente hay que llevarlos a zonas donde se puedan mover libremente y su cráneo se desarrolle y adapte de forma normal por su cuenta.
Por el contrario, aquellos cuyos huesos se hayan colocado ya en una posición del cráneo, pueden comenzar a llevar una especie de cascos que les ayuda a recolocar la parte frontal de la cabeza y hacerla más redondeada, más natural y correcta.
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De todas formas, si estás preocupado por dejar dormir al bebé un par de horas en el sillón del coche, los expertos afirman que no existe problemas si no se repite continuadamente.
Sólo ten en cuenta y procura ponerlo de nuevo en la cuna una vez que estén profundamente dormidos.
De esta forma, su cráneo se desarrollará correctamente, y será más fácil volver a ponerlos en la cuna, ya que estarán acostumbrados a ella.
Si crees que es importante que tus amigos y familiares con recién nacidos sepan este útil consejo,
¡No olvides compartir esta noticia con todos ellos!
Fuente: Little Things Imagen Portada: Cosasdbebes.com
