Cuando piensas en la Edad Media probablemente aparezcan tu cabeza imágenes sobre caballos, armaduras y espadas, pero la realidad era muy diferente.
Las costumbres del medievo en Inglaterra eran bastante curiosas y para nada como hemos pensado hasta ahora.
Así era la vida en la Edad Medieval
1- Heces por las calles
Las heces y los residuos convivían en las calles con los ciudadanos. Se decretó una ley que decía que se debían acumular los residuos para luego llevarlos a las afueras de la ciudad.
El principal problema es que la gente no solo acumulaba basura, sino que también arrojaba a las calles el contenido de sus orinales.
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2- La gente iba más perfumada de la cuenta
Esto provocó que una montaña enorme de residuos se acumulase y fuese casi imposible pasear, por lo que la gente solía ir con un pañuelo impregnado de perfume para poder andar por la calle.
3- Las heridas se desinfectaban con el pis
Los doctores desinfectaban las heridas de los soldados con su propio pis. Quemaduras o cortes eran tratados con la orina de los médicos, y lo más curioso es que funcionaba. El amoníaco de la orina actuaba como cicatrizante y resultaba ser bastante efectivo.
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4- La peste negra
La higiene hasta este punto de la historia había sido bastante buena. Los ciudadanos se lavaban con bastante asiduidad hasta que llegó la gran Peste Negra. La aparición y extensión de esta grave enfermedad, hizo que los médicos le echaran la culpa a la costumbre que tenía la gente de bañarse tan frecuentemente.
5- El parto era un milagro
El parto durante aquella época era casi un milagro. Con la pérdida de sangre y las enfermedades que podían surgir por las condiciones higiénicas, era muy difícil que la madre, el hijo o ambos no murieran en el parto.
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Existía una creencia de que si cubrían a la mujer con heces de águila mientras le daban vinagre con azúcar, la madre viviría. Además, la intervención divina en estos casos era muy admirada, por lo que monjes y matronas rezaban para que no muriese.
6- Mejor no pisar el suelo
El suelo de las casas estaba compuesto por sedimentos formado por las heces de las vacas, comida podrida y barro, además de otros compuestos que seguro que no quieres saber. Las personas que residían en una casa normal, tenían que dormir en ese suelo y no lo hacían solos, también en compañía de las ratas e insectos.
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7- Y lo de acercarse al río ni pensarlo
El río Támesis que es tan emblemático, era el vertedero de los carniceros en esta época. Cuando la carne se podría, transportaban hasta el puente todo el sobrante y lo arrojaban al río, lo que provocaba un mal olor que inundaba la ciudad.
Las costumbres y creencia de esta etapa de la historia no eran nada acertadas ni se parecen en nada a las que tenemos ahora. Lo más importante es que vamos aprendiendo de épocas pasadas para avanzar siempre hacia el futuro.
