Cuesta imaginarse a uno mismo atrapado en un sótano durante semanas, meses y, en algunos casos, incluso años. Ningún ser humano es digno de pasar por una tortura de este tipo. Por desgracia, ha sucedido en muchas ocasiones.
Estos son algunos de los secuestros más largos y terribles que se conocen
1- Elizabeth Shoaf, Carolina del Norte
20 minutos
En 2006, Elizabeth Shoaf fue secuestrada con tan solo 14 años por Vinson Filyaw, que se hizo pasar por un oficial de policía. Le dijo que estaba bajo arresto y la condujo al bosque. Allí, en un búnker oscuro y estrecho que había cavado en el suelo, la desnudó y la encadenó por el cuello y la violó. La tuvo encerrada durante 10 días.
Cuando llegó al bosque, Elizabeth se quitó sus zapatos con la esperanza de que alguien los encontrara. Más tarde, cuando ya se había ganado la confianza de su secuestrador y le permitió salir del búnker, se arrancó mechones de pelo y los tiró al suelo como pista.
Elizabeth finalmente se salvó gracias a que envió a su madre un mensaje de texto desde el teléfono del secuestrador cuando éste se había ido a dormir. Cuando el secuestrador se enteró de que lo estaban buscando, escapó y ella pudo salir del búnker. Fue encontrada en el bosque y llevada al hospital. Vinson finalmente fue atrapado y condenado a 421 años de cárcel.
2- Katie Beers, Long Island
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Katie Beers sólo tenía 10 años en 1993, cuando un empresario de la construcción llamado John Esposito la secuestró. John llevó a Katie a un búnker subterráneo debajo de su casa en Long Island, donde la mantuvo encadenada y abusó de ella muchas veces durante los 16 días que la mantuvo cautiva.
Esto no fue lo único que sufrió esta pequeña, ya que su padre Sal Inghilleri la trataba como una esclava, y abusaba de ella y la violaba.
Después de que fuera liberada de su cautiverio, Katie fue enviada a un hogar de acogida donde unos padres adoptivos cuidaron de ella y le proporcionaron todo lo que necesitaba. Sal Inghilleri fue condenado a 12 años de presión, aunque murió en 2009; y John fue condenado a 15 años.
3- Elizabeth Smart, Utah
dailymail
En 2002, Elizabeth Smart fue secuestrada de su casa en Salt Lake City, Utah. Su hermana menor Mary Katherine vio lo que pasó e inmediatamente reconoció la voz del secuestrador, pero no fue capaz de identificarla.
Fue llevada al bosque por un hombre posteriormente identificado como Brian David Mitchell, y su esposa Wanda Banzee. La mantuvieron allí durante nueve meses, durante los cuales le hicieron beber alcohol y ver pornografía.
Cuatro meses después del secuestro, la hermana fue capaz de identificar la voz y se pudo elaborar un boceto. Un ciclista que vio el programa, lo reconoció y alertó a las autoridades. Brian fue condenado a cadena perpetua y Wanda a 15 años de prisión por su participación en el secuestro.
4- Wolfgang Priklopil, Austria
b.dk
Wolfgang Priklopil era un técnico en comunicaciones en Austria, y todo el mundo lo consideraba un tipo de lo más normal hasta que descubrieron que era un secuestrador. En 1998, Wolfgang secuestró a Natascha Kampush, una niña de 10 años de edad.
Wolfgang mantuvo a Natasha en cautiverio durante 8 años, y se suicidó cuando ella finalmente logró escapar. Natascha fue capaz de escapar cuando su secuestrador dejó de pasar la aspiradora al coche para coger una llamada y, entonces ella corrió a la policía. Él dijo que no estaba dispuesto a enfrentarse a la justicia y saltó delante de un tren.
5- Shawn Hornbeck, Missouri
telegraph
Shawn tenía 11 años cuando fue secuestrado por Michael J. Devlin mientras montaba en bicicleta en 2002. Pasó más de cuatro años en cautiverio.
Shawn pasó su primer mes de cautiverio atado y con la boca tapada con cinta adhesiva. Su secuestrador lo amenazó con que si trataba de escapar, lo matarían. Además de la tortura, su secuestrador le hizo fotografías y vídeos pornográficos.
No fue hasta que Michael secuestró a uno de sus vecinos, cuando la policía sospechó de él y entró en su apartamento. Cuatro días después los encontraron a los dos. Michael fue condenado por secuestro, abuso de menores y producción pornográfica infantil. Un total de 1.850 años.
6- Fusako Sano
allday
Fusako Sano era una niña de 9 años de edad, de Japón, que fue secuestrado por un hombre mentalmente perturbado llamado Nobuyuki Sato, que la obligó a subir a su coche cuando regresaba de un partido de béisbol en el colegio.
Noboyuki encerró a Fusako en las habitaciones del piso superior de un edificio de apartamentos en el que vivía con su anciana madre.
Todo ese tiempo Fusako permaneció atada, fue afeitada y castigada con unas pistola eléctrica, amenazada y golpeada regularmente. Lo triste es que había una comisaría de policía a tan solo 200 metros de distancia de donde la chica estaba detenida, y aún así no la encontraron en más de nueve años.
7- Colleen Stan, California
nydailynews
Cameron y Janice Hooker secuestraron a Colleen Stan en mayo de 1997 en California, cuando ella estaba haciendo autostop para ir a la fiesta de cumpleaños de su amiga. Colleen aceptó entrar en el coche de Cameron porque iba con su mujer y su hijo, y esto lo hizo sentirse segura.
La pareja cogió a Colleen y la obligaron a meterse en una caja. La torturaron y la usaron como esclava sexual durante siete años, hasta que, finalmente, Janice llamó a la policía para informar a su marido porque empezó a sentir celos. Cameron fue condenado a 104 años de prisión, y su esposa se libró de la cárcel por testificar en su contra.
8- Jaycee Dugard, California
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Jaycee Dugard tenía solo 11 años cuando fue secuestrada en 1991. Su secuestrador, Phillip Garrido, la sorprendió con una pistola eléctrica, dejándola inconsciente.
En un primer momento, la niña fue encerrada en un espacio muy pequeño, donde su secuestrador la obligaba a ducharse con él y la violaba, mientras la mantenía esposada.
Meses después, fue trasladada a una unidad más grande y esposada a la cama, donde le daba anfetaminas y producía material pornográfico. Cuando solo tenía 13 años, se quedó embarazada de su primer hijo. Tres años más tarde, dio a luz a una niña.
Cuando Jaycee finalmente fue encontrada, ella se negó a admitir lo que había sucedido. No fue hasta que el secuestrador lo confesó, cuando ella reveló su identidad. Más tarde se hizo evidente que después de 18 años de cautiverio, Jaycee sufría síndrome de Estocolmo. Su secuestrador fue condenado a 431 años de prisión.
